Reemplazarlas por plantas
Comenzar a masticar plantas comestibles como la raíz de regaliz (hay que hacerlo lentamente). De esta forma, se evita comerse las uñas y la boca se mantendrá ocupada. Es importante habituarse a tener estas plantas cerca en los momentos de estrés. También ayudarán a que te concentres mejor.
El chicle sin azúcar
Esta es una buena alternativa. Comer chicle o caramelos de menta en cuanto se siente unas ganas irreprimibles de comerse las uñas, puede ser una idea excelente. Además, será triplemente beneficioso. Las manos estarán ocupadas, el aliento será fresco y se evitarán también las arrugas, gracias a los movimientos de los músculos de la mandíbula.
El aloe vera
La planta de aloe vera tiene muchos beneficios para la salud, pero su gusto no siempre es muy bueno. Se pela con un cuchillo una hoja de aloe vera, se corta en cuadrados, se meten en la nevera y cada mañana se frotan sobre las uñas (un trozo por uña). Una vez que se haya sentido el gusto del aloe, se mantendrán las uñas alejadas de la boca.
Ejercicios de autocontrol
Este ejercicio te ayudará a controlar las ganas de comerte las uñas:
- Llevarse un dedo a la boca y parar cuando esté a 5 centímetros de los labios.
- Alejarla.
- Repetir esta acción varias veces y las distancias deben ser cada vez más cortas.
- Intenta meter un dedo entre los dientes durante algunos minutos, sin morder la uña. Repetir esta acción.
Realizar este ejercicio algunos minutos al día, y pronto te sorprenderás de los resultados.
Uñas postizas
Cubrir las uñas con unas prótesis, posibilitando que las naturales crezcan normalmente. Esto impide que te las comas: si te han costado caro, puedes estar segura de que evitarás por todos los medios destruir las uñas postizas con la boca.
Tiritas en las uñas
Se deben cubrir las uñas con tiritas. Se dejan puestas varios días. Se pueden cambiar cada vez que te duches. La idea es dejar pasar un cierto tiempo: de esta forma, cuando las retires completamente, estarán brillantes y sanas. Esto se puede repetir tantas veces como sea necesario.
Adoptar un pasatiempo
Esta actividad te evitará morderte las uñas. Lo mejor sería que este pasatiempos fuese una actividad manual para mantener las uñas fuera de tu boca. Por ejemplo, realiza jardinería, esculturas de arcilla o greda, pinta yesos, etc. Ideal sería que mientras practicas este nuevo pasatiempo, te ensucies las manos para que sea aún más fácil mantenerlas lejos de los dientes.