Miles de argentinos se trasladaron hasta Japón para ver a su equipo jugar la hipotética final con Barcelona. Un sacrificio que se hará realidad porque pese al sufrimiento, River Plate ya es el primer finalista del mundial de clubes tras vencer por la cuenta mínima al Sanfrecce Hiroshima.
El campeón de la Copa Libertadores jugará en Yokohama este próximo domingo con el vencedor de la semifinal del Mundial de Clubes entre el Barcelona y el Guangzhou Evergrande de China, que se disputará mañana.
En un partido de mediocre trámite, el cuadro que dirige Marcelo Gallardo se llevó la victoria gracias a un gol del delantero Lucas Alario en el minuto 72. En la primera parte el arquero y capitán Marcelo Barovero había salvado a su equipo con tres paradas de altura.
Llegaron cerca de 15.000 hinchas de «la banda» que están en Osaka hicieron al equipo sentirse como en casa, animando desde horas antes de que empezara el partido e instalando todas las banderas de las filiales que habitualmente adornan el Estadio Monumental.