El Gobierno de Colombia promoverá las conversaciones entre las comunidades de la región del Catatumbo, ubicada al noreste del país, con miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN), con el propósito de buscar una solución a los conflictos armados que mantiene este grupo con el Ejército Popular de Liberación (EPL) que ha afectado a más de 140.000 habitantes.
Estos enfrentamientos se mantienen desde hace un mes entre el ELN y el EPL que buscan el control del territorio para la siembra de coca y asegurar las vías para el narcotráfico, perjudicando a un total de 144.000 residentes que han tenido restricciones en el acceso a los servicios y alimentos, así como limitaciones para la movilidad.
De esta cantidad, 2.819 se han visto obligados a desplazarse a otras zonas de Colombia y 44.829 son niños y niñas que han tenido que abandonar las aulas de clase desde hace una semana, debido al paro armado decretado por el EPL que ha amenazado con el ELN de mantener la lucha armada para defender el territorio, según informaciones difundidas por la Defensoría del Pueblo de Colombia.
El vicepresidente colombiano, Óscar Naranjo, manifestó que a través del Alto Comisionado para la Paz y el Ministerio del Interior, garantizará el diálogo entre miembros de la comunidad del Catatumbo con el ELN.
Además, anunció que desde este lunes se instaló un puesto de comando unificado en el municipio de Ocaña, aledaño al Catatumbo, para coordinar las visitas de la Defensoría del Pueblo y de organizaciones sociales hacia los albergues comunitarios de La región.
Igualmente, indicó que se establecerán corredores humanitarios para garantizar la salida de aquellas personas que requieran atención médica y el abaste cimiento de alimentos.
Por su parte, el ministro de Defensa, Luis Villegas, dijo que se fortalecerá la presencia militar y policial, lo que fue confirmado por el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien señaló que 2.000 militares reforzarán la seguridad en la región.