Jorge Linares hizo mérito para revancha con Lomachenko

El pugilista venezolano Jorge Linares, que perdió el título mundial ligero con el ucraniano Vasyl Lomachenko, dividía la apreciación en la tarjeta de los jueces antes de caer en el décimo asalto por un gancho fulminante al hígado

Jorge Linares hizo mérito para revancha con Lomachenko

Autor: Gerardo Blanco

Jorge Linares aguantó hasta donde pudo el poder demoledor del ucraniano Vasyl Lomachenko, una máquina de tirar golpes y aflojar las piernas de los rivales con un castigo constante que va agotando el cuerpo, la valentía y la mente.

El campeón mundial venezolano de los pesos ligeros había mostrado su habilidad en el ensogado con rivales de menor jerarquía, a los que superó con velocidad en los puños, meticulosidad y firmeza en la pegada.

Venía de derrotar dos veces al inglés Anthony Crolla en Manchester, y en su regreso a los ensogados de Estados Unidos, en busca de mayor promoción a su carrera, superó a Luke Campbell y Mercito Gesta.

Todos boxeadores que estaban en una escala menor, sin pegada fulminante ni argumentos en el cuadrilátero para poner en peligro la faja de Linares.

Pero Lomachenko es una versión renovada del filipino Manny Pacquiao.

Al doble campeón olímpico en Beijing y Londres le sobran recursos técnicos y físicos para imponerse en el ring. Dos títulos mundiales en los peso pluma y super pluma con diez triunfos, ocho de ellos por la vía del sueño, daban cuenta de su temible pegada.

Y Linares lo sufrió desde le primer asalto. Lomachenko metió el jab de derecha, pegó el uppercut y fue minando la resistencia de Linares conectado arriba y abajo el gancho de izquierda.

Sin embargo, el venezolano mostró coraje y desde el sexto asalto comenzó a dominar la refriega al derribar a Lomachenko con un recto de derecha que dividió la apreciación de los tres jueces sobre lo que ocurría en el ring del Madison Square Garden de Nueva York.

Hasta el noveno round las tarjetas estaban parejas: 85-85 para el juez Julien Lederman; 86-84 para Linares en la cuenta de Robin Taylor; y 84.84 para Lomachenko en la anotación de Steve Weisfeild.

Pero Lomachenko acabó con las provisiones de energías de Linares que al terminar el noveno asalto buscó aire desesperadamente en una señal inequívoca de fatiga. 

El ucraniano olió la sangre y con su velocidad para golpear conectó un magistral gancho de zurda que puso fin al combate en el décimo round, cuando en el minuto 2:08 impactó al hígado a Linares y le hizo doblar las piernas para despojarlo del título mundial peso ligero de la AMB.

Fue una pelea digna de un escenario legendario para el boxeo como el Garden de Nueva York por el intercambio de golpes y la reciedumbre del careo.

¿Cuál es el futuro que le espera a ambos gladiadores?

Lomachenko, de 30 años, demostró que es el mejor libra por libra de los pesos inferiores, pues en las categorías superiores está el kazajo Gennady Golovkin, la otra estrella del boxeo mundial.

En el peso ligero puede tener un largo reinado, pues los rivales que lo pudieran incomodar son el cubano Razas Bathelemy con 26-0 y propio venezolano Linares.

Lo más probable es que Lomachenko defienda un par de veces el título y busque el cuarto cinturón en la categoría super ligero, donde podría firmar un combate millonario con el búlgaro Kiryl Relikh, actual campeón de esa división con 29-2 y 19 nocauts.

A sus 32, Linares hizo méritos para aspirar a la revancha, porque defendió su título con inteligencia en el ring y coraje para complicar al ucraniano. Las tarjetas divididas avalan su petición del final del combate de enfrentarse de nuevo con el ucraniano.

Pero antes, seguramente, tendrá que vencer al haitiano Evens Pierre (24-1, 17 nocauts), primer clasificado de la división para subir sus acciones en el mundo del boxeo y, por la vía de los golpes, ganarse el derecho de retar a su verdugo.


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano