Durante el año 2108, la desocupación en Argentina aumentó de 7,2 % a 9,1 % entre la población activa urbana, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Esto se traduce en que la nación sudamericana cerró el año con 1.750.000 desempleados, 400 mil más que en 2017.
Además, entre las personas que conservaron su empleo o encontraron ocupación remunerada, creció la precariedad laboral, la tasa de subocupación (quienes trabajan menos de 35 horas semanales) subió de 10,2 % a 12 %. Se generaron 330 mil subocupados más en 2018, para un total de 2,3 millones.
Otro dato aportado por el Indec es que entre los asalariados privados se incrementó la informalidad laboral (asalariado sin descuento jubilatorio) de 34,2 % a 35,3 %.
Presión en el mercado laboral
El Indec analiza todas las cifras expuestas, a las que agrega la pérdida del poder adquisitivo y el constante aumento de la inflación, y señala que se incrementó la «presión sobre el mercado de trabajo» del 27,3 al 32,9 %.
Esto quiere decir que, si se suman los desocupados, más los ocupados y subocupados que buscan otro empleo y le añades los ocupados y subocupados dispuestos a trabajar más horas, existen 6,2 millones de trabajadores que «presionan» en el mercado laboral argentino, 1,2 millones más en comparación que el año anterior.
La muestra del Indec es de las zonas urbanas, es la proyección de 31 aglomerados estudiados, pero no incluye el mercado de trabajo rural.
FMI empobrece a Argentina
Esta semana, el Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció que la nación sudamericana recibirá 10.780 millones de dólares, como parte de un nuevo endeudamiento. El préstamo viene acompañado de una mayor restricción del gasto público.
En este sentido, el FMI estima que el índice de inflación en Argentina será de 40 % y no de 30 % como estaba previsto para este 2019.
Desde que el presidente Mauricio Macri accedió al financiamiento del FMI, comenzaron los recortes en la inversión social, así como el despido masivo de empleados públicos, entre otras medidas neoliberales adoptadas debido a las exigencias del ente financiero.
Según datos del Observatorio de la Deuda Social de la Argentina, desde que Macri asumió el poder, en diciembre de 2015, la pobreza se incrementó en 33,6 % y la indigencia en 6 %.
El dirigente social Daniel Menéndez, asegura que la gestión de Macri instauró el hambre en la nación. «El hambre es un elemento nuevo en el país, por lo que los comedores populares están detonados».
Insiste en que se debe mostrar a diario esta realidad, debido a que en Argentina existen 20 millones de ciudadanos que sobreviven gracias a alguna red de asistencia.
https://www.elciudadano.cl/argentina/argentina-fmi-exige-mas-recortes-al-gobierno-mauricio-macri/12/30/
https://www.elciudadano.cl/mundo/trump-respalda-el-paquete-de-medidas-de-macri-en-medio-de-la-crisis-argentina/09/05/