Altos funcionarios que participan en las negociaciones de la conferencia de biodiversidad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Canadá afirmaron que confiaban en lograr un acuerdo para salvar la naturaleza, cuando este domingo vence el tiempo para llegar a un consenso.
El pasado 7 de diciembre arrancó la COP15 de biodiversidad, donde delegaciones de las Partes firmantes del Convenio de Diversidad Biológica (CDB) se reúnen con el objetivo de aprobar el Marco Global para la Biodiversidad Post-2020.
El primer borrador se publicó en julio de 2021, con más de un año de retraso.
Desde entonces el Grupo de Trabajo se ha reunido periódicamente con el objetivo de lograr avanzar en los acuerdos para llegar a Montreal con un texto sintetizado.
Sin embargo, una semana después del inicio de la COP15 aún se discute un documento que no logra posicionarse en las cuestiones más controvertidas, repleto de sugerencias, textos alternativos y posturas incompatibles.
La COP15 convoca a gobiernos, organizaciones y sector privado para acordar un nuevo Marco Global de la Diversidad Biológica posterior a 2020, que debe ser un plan ambicioso para transformar la relación de la sociedad con la biodiversidad y garantizar que para 2050, se cumpla la visión compartida de vivir en armonía con la naturaleza.
Los presentes en la conferencia están trabajando para frenar la destrucción del hábitat, la contaminación y la crisis climática que pone en peligro la extinción de aproximadamente un millón de especies plantas y animales.
Los acuerdos deben de ser una hoja de ruta para las naciones hasta el 2030, después que el último acuerdo firmado en Japón de 10 años no logrará ninguno de sus objetivos por falta de mecanismos de monitoreo en su implementación.
Dentro de los objetivos que se discuten está un compromiso para la protección del 30 por ciento de los espacios marítimos y terrestres, la reducción de los subsidios agrícolas dañinos del medio ambiente, la exigencia de que las empresas divulguen los impactos de estos en la naturaleza, y el establecimiento de políticas sobre especies invasoras.
Las comunidades indígenas demandan que salvaguardan el 80 por ciento de la biodiversidad solicitan que aparezca en el acuerdo el derecho a la administración de sus tierras.
Los compromisos, según los observadores, no son suficientes a lo que se necesita y de lo que requieren los países en desarrollo.
Fuente teleSUR
Te puede interesar