Una nueva investigación afirma que el fin de esa era no fue causada por el asteroide Chicxulub sino por una intensa actividad volcánica.
El estudio, dirigido por la geocientífica Sara Callegaro de la Universidad de Oslo, Noruega, se basa en el análisis de rocas de los traps del Decán, una gran provincia ígnea situada al centro-oeste de la India.
Los investigadores encontraron que esta región volcánica liberó la asombrosa cantidad de un millón de kilómetros cúbicos de roca fundida durante un período de unos 2 millones de años.
Esta actividad volcánica habría liberado grandes cantidades de azufre y otros gases a la atmósfera, lo que habría causado un enfriamiento global y la destrucción de la capa de ozono.
Esto habría hecho que la Tierra fuera un lugar mucho más hostil para la vida, y habría contribuido a la extinción de los dinosaurios y de muchas otras especies.
El estudio de Callegaro y sus colegas no descarta por completo el papel del asteroide Chicxulub en la extinción de los dinosaurios, pero sugiere que la actividad volcánica fue el factor principal que provocó esta catástrofe.
Fuente: Science Advances