Un estudio reciente estudio ha revelado que la actividad física laboral intensa puede aumentar el riesgo de deterioro cognitivo en personas mayores.
El estudio siguió a más de 7,000 adultos noruegos durante 44 años, encontró que aquellos con una actividad física laboral constante o alta tenían un mayor riesgo de desarrollar deterioro cognitivo leve y demencia después de los 70 años.
Los investigadores sugieren que la falta de autonomía, la realización de tareas repetitivas, las largas jornadas y el estrés asociado con trabajos físicamente exigentes pueden contribuir a estos riesgos.
Por el contrario, el ejercicio moderado practicado en el tiempo libre, como caminar alrededor de 10,000 pasos, tiene el efecto contrario, ya que actúa como un protector de la salud.
Este estudio sugiere que la actividad física laboral intensa no siempre es beneficiosa para la salud. Es importante tener en cuenta la calidad de la actividad física, no solo la cantidad.
El ejercicio moderado practicado en el tiempo libre es la mejor opción para la salud cognitiva y física.
Fuente: The Lancet Regional Health-Europe