¿Se enfrían los mercados mundiales con los coches eléctricos?

Parece que el entusiasmo de los estadounidenses por los vehículos eléctricos (VE) se está enfriando. Lo que se necesita ahora son coches eléctricos nuevos y más asequibles para despertar de nuevo el interés.

Las cifras revelan que las ventas de coches eléctricos en Estados Unidos llevan medio año estancadas en torno a 100.000 unidades al mes. Esto se produce después de un periodo en el que se vendían rápidamente.

El declive del sentimiento del mercado se está haciendo patente en el sector de los vehículos eléctricos. Por ejemplo, Tesla, uno de los principales actores del mercado, ha reducido sus precios. El pasado mes de octubre, el precio medio de un coche eléctrico nuevo rondaba los 52.000 dólares, frente a los 65.000 del año anterior.

¿Por qué las grandes empresas automovilísticas frenan sus inversiones en VE?

¿Es importante esta ralentización? Es difícil asegurarlo. Incluso grandes empresas automovilísticas como Ford y General Motors están invirtiendo menos dinero en coches eléctricos de lo previsto. Incluso Elon Musk, de Tesla, habló de ralentizar un poco el ritmo.

Musk culpa a los altos tipos de interés, que encarecen los préstamos para comprar coches. Pero el mercado general del automóvil en Estados Unidos sigue funcionando bien, incluso con precios altos. Así que hay algo más en la historia.

Parece que el primer grupo de personas aficionadas a los coches eléctricos, sobre todo aficionados adinerados a la tecnología, ya han comprado los suyos. Conseguir que más gente se pase a los coches eléctricos depende ahora de ofrecer precios más bajos, mejorar la infraestructura de recarga e introducir nuevos modelos innovadores. Toyota, líder en tecnología híbrida, está aumentando su inversión en estas áreas.

Puede que algunos estén esperando al nuevo Tesla Model 3, que se puede conseguir en China y Europa, pero aún no en Estados Unidos. Otra cosa es el crédito fiscal de 7.500 dólares para VE en EE.UU., que será más fácil de conseguir el año que viene. Pero todavía es complicado, porque los fabricantes de automóviles tienen que seguir nuevas reglas para obtener este beneficio.

¿Cómo afecta al mercado la bajada de precios de los vehículos eléctricos?

¿Lo que más frena a la gente a comprar coches eléctricos? El precio. Según una encuesta de S&P Global Mobility, el precio es el principal motivo de duda, seguido de la preocupación por la recarga.

He aquí algo interesante: Bajar el precio de los coches eléctricos no siempre los hace más asequibles. ¿Por qué? Porque muchos coches eléctricos se alquilan, y los precios de alquiler dependen de lo que valga el coche más adelante. Cuando bajan los precios de los coches nuevos, se altera el valor de los coches eléctricos usados.

El gran reto de los fabricantes de automóviles es abaratar la fabricación de coches eléctricos. Ahora mismo, aparte de Tesla y algunas empresas chinas, cuesta más fabricar un VE que venderlo. Ford, por ejemplo, pierde dinero con sus coches eléctricos, como el Mustang Mach-E y el F-150 Lightning. En Francia, Renault también quiere reducir costes.

¿Por qué es difícil que los coches eléctricos sean más asequibles?

Pero reducir costes es difícil. Si los coches eléctricos son demasiado básicos, la gente se quedará con los de gasolina. Musk habló de un Tesla más básico de 25.000 dólares, pero eso no entusiasmó demasiado a la gente.

Obtener piezas de China podría ayudar a reducir costes, pero es complicado, sobre todo en Estados Unidos, donde hay normas sobre dónde se pueden obtener las piezas si se quieren obtener créditos fiscales. El plan de Ford de trabajar con una gran empresa china de baterías está en suspenso mientras lo resuelven.

Un gran problema es que las piezas de los coches eléctricos, como baterías y motores, cuestan más que las de los coches de gasolina. Esto es especialmente cierto en el caso de los vehículos grandes, que tanto gustan a los estadounidenses. Aunque los coches eléctricos son más baratos, la mayoría de la gente sólo piensa en el coste del combustible cuando sube el precio de la gasolina. Las empresas automovilísticas deben recordar que la mayoría de los compradores no quieren pagar más por un coche eléctrico.

Conclusión

Así pues, las empresas automovilísticas tienen mucho trabajo por hacer. Tienen que replantearse cómo fabrican los coches para ahorrar dinero. Los coches eléctricos son más sencillos en algunos aspectos, pero hacer estos cambios en una gran industria como la automovilística es difícil. Incluso a las empresas que empiezan a fabricar coches eléctricos, como Rivian, les está resultando caro.

Al final, es probable que las empresas automovilísticas lo solucionen, sobre todo porque los gobiernos quieren más coches eléctricos por razones medioambientales. Pero llevará tiempo y mucho dinero. Y puede que a la próxima oleada de coches eléctricos le cueste cumplir las altas expectativas de las anteriores.