El pasado 13 de noviembre, Ernesto Llaitul, Esteban Henríquez, Ricardo Delgado Reinao y Nicolás Alcamán, iniciaron una huelga hambre con la intención de exigir la anulación de su juicio -el que los condenó a 15 años de prisión-, por considerarlo injusto, racista y viciado, puesto que, el Ministerio Público no presentó pruebas durante el proceso judicial.
Sin embargo, se sumaron a esta huelga otros 11 comuneros mapuche -miembros de la Coordinadora Arauco Malleco-, cumpliéndose en total 86 días desde iniciada la huelga de hambre.
Respecto a esto, El Ciudadano conversó con Javiera Plaza, vocera de los presos mapuche en huelga de hambre y esposa de Ernesto Llaitul, quien denunció que esta condena política es un resultado de la persecución y criminalización de ellos como personas del Pueblo Mapuche; apuntando a los tribunales de Justicia por entregar este tipo de condenas, que «son arbitrarias» y por «ceder ante las presiones políticas que provienen de los grandes grupos económicos y empresariados, provocando condenas injustas que no tienen pruebas».
¿Cuáles son los motivos de seguir con la huelga de hambre?
Entre las razones se encuentran la negativa a las demandas por exigir condiciones carcelarias básicas y la habilitación de un módulo de comuneros, esto porque en la región del Bío Bío no existe un módulo de estas características. Para la vocera las políticas carcelarias existentes, son las que se han encargado de perpetuar la persecución y represión dentro de las cárceles, negando y vulnerando los derechos fundamentales de los comuneros como miembros del pueblo originario Mapuche.
-Si bien existen convenios vigentes firmados por el Estado de chile, estos no son respetados dentro del sector de Bio Bío-, comentó Javiera Plaza.
Por estas solicitudes -especialmente la del módulo- las voceras y familiares de los presos Mapuche en huelga de hambre, se dirigieron al Ministerio de Justicia, con el objetivo de exigir una respuesta a la carta que entregaron previamente, instancia en la que fueron duramente reprimidos por Carabineros.
Pero a pesar de ello, el pasado viernes habrían logrado concretar una reunión con el subsecretario de justicia y el Director Nacional de Gendarmería. No obstante, no obtuvieron la respuesta que esperaban a sus demandas.
-Nos sentamos a conversar y exigir una respuesta por el petitorio, y el día de hoy entregaron una respuesta insatisfactoria, una resolución que no es mas que un instructivo que se le envía a las cárceles, pero que no es nada concreto. Por lo tanto, los presos políticos mapuche de la CAM han decidido mantener la huelga hasta que no haya algo en concreto, y también porque en dicha resolución y la reunión, se negó la posibilidad de la habitación de un modulo comunero, por lo tanto, no entregan un espacio acorde a las características de ellos como mapuches-, explicó la vocera.
Sin embargo, Plaza insiste que es responsabilidad del subsecretario de Justicia, Jaime Gajardo, que esta huelga continúe, puesto que, están en conocimiento de que existen leyes y tratados internacionales que permiten la implementación de módulos de comuneros. Por lo que esta «es una decisión política de no querer ceder, y sabemos que en gobiernos anteriores se facilitaron módulos para comuneros mapuches, y no entendemos por qué en este gobierno han mantenido esa postura de no querer implementar estos módulos».
-Como familiares y voceros estamos atentos a cómo se vaya desarrollando. Estamos próximos a cumplir los 90 días de hambre y ellos mantienen su postura de continuar hasta las últimas consecuencias. Este viernes 9, la Corte de Apelaciones tiene que entregar la resolución respecto al recurso de anulación y ver si se acepta o no. Por lo tanto, estamos esperando las respuestas-, finalizó.
Hasta el cierre de esta nota, se encuentran tres mapuche hospitalizados: Esteban Henríquez, Nicolás Alcamán y Ricardo Delgado, quienes han evidenciado un evidente deterioro en su salud. Además, el líder de la CAM, Héctor Llaitul, también se encuentra en huelga de hambre -la que ya se ha extendido en más de 60 días-.