Con los labios parchados y lienzos en sus manos, el Sindicato de Periodistas de La Nación llegó hasta las afueras del histórico edificio que acogió por años a este medio, al mismo tiempo que en otro lugar se daba inicio a la apertura del sobre con las ofertas de compra del diario. “Desperdician la oportunidad de hacer de este diario una herramienta de mayor diversidad en la prensa chilena”, indicó la Presidenta del Sindicato en un categórico emplazamiento al rol del Estado y el derecho a la información.
Mientras la comisión liquidadora de La Nación, mantenía en absoluto secreto el lugar donde se abriría el sobre con las ofertas de compra del histórico medio La Nación, un indignado grupo de trabajadores llegó hasta las puertas de su ex edificio para manifestar su tajante rechazo a la licitación. En el acto, donde se incluyó la entrega de una carta al Presidente Sebastián Piñera, el Sindicato llamó a éste a ser parte de otra historia, “usted decide, no adjudique el diario La Nación al mejor postor, envíe un proyecto al parlamento que ordene por ley la autonomía e independencia de La Nación”, dice parte de la misiva entregada al mandatario.
Nancy Arancibia, Presidenta del Sindicato de Periodistas de La Nación, fue quien tomó la palabra, “la decisión de hacer esta actividad simbólica justo cuando Claro y asociados, empresa externa encargada de hacer la licitación del diario, está abriendo el sobre con las ofertas del diario La Nación ha sido para representar lo que significa que en un país democrático, o supuestamente democrático, se venda un diario al mejor postor, sin ningún recaudo de lo que significa un medio de 97 años”.
La vocera de quienes por años formaron parte del diario, puso énfasis en las consecuencias del cierre de un medio mayoritariamente estatal, “a pesar de ser vendido esto significa un cierre, significa eliminar un espacio de diversidad con el único capaz de garantizarlo a todos los chilenos, el Estado. Lejos de promover y fortalecer ese rol, este gobierno lo que está asistiendo hoy día es aumentar la concentración a través de la venta y entendimiento de mercancía de la información”.
Que el diario logre una independencia no sólo del poder económico sino también del político, es la apuesta que hacen los manifestantes, sugiriendo una regulación y una ley discutida en el Congreso. “Desperdician la oportunidad de hacer de este diario una herramienta de mayor diversidad en la prensa chilena”.
Finalmente Nancy Arancibia se dirigió a entregar la carta al Presidente de la República, cuyo contenido da cuenta del peso de la venta de un diario que aportó por casi 100 años al país. “Un error no se corrige con otro error”, sentenció Arancibia, haciendo alusión a la previa venta de los archivos históricos del diario.
El 27 de enero será la fecha decisiva para el diario, pues entonces La Nación será adjudicada a manos del mejor postor.
Por María Jesús Ibáñez Canelo
El Ciudadano