Con el objetivo de formalizar una instancia de trabajo intersectorial para aunar esfuerzos en defensa de los ecosistemas del Valle del Aconcagua, y -en particular- del Parque Andino Juncal de Los Andes, el Gobernador Regional de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, se reunió en la comuna de San Esteban con distintas autoridades y actores relevantes de la zona, constituyendo la Comisión Alto Aconcagua que tendrá por propósito consagrar una reserva estratégica de agua dulce para la zona y la Región de Valparaíso.
De esta forma, se abordó la situación de los ríos Juncal y Rocín de la zona, la crisis hídrica que afecta al valle, además de presentar una propuesta de trabajo que integre acciones inmediatas para la protección de las cuencas de estos ríos, junto con relevar la importancia de fortalecer la institucionalidad del Gobierno Regional y municipios en esta materia.
Igualmente, se avanzó en el mapeo de diagnóstico para la protección ecosistémica de la cabecera de cuenca del Río Aconcagua, al igual que proyectar una agenda legislativa para la protección de estos.
En la oportunidad participaron los alcaldes de San Esteban, Christian Ortega; de Catemu, Rodrigo Díaz; de Santa María, Manuel León; de Putaendo, Mauricio Quiroz; de Panquehue, Gonzalo Vergara; y los consejeros regionales María Victoria Rodríguez, Edith Quiroz y Eduardo León.
También estuvieron presentes el director regional de la Dirección General de Aguas, Camilo Mansilla, miembros de APRs de la zona, juntas de vigilancia del Río Aconcagua, representantes del Parque Andino Juncal, además de organizaciones sociales del Valle de Aconcagua.
Tras la cita, el Gobernador Rodrigo Mundaca destacó la creación de la instancia, recalcando que «nace a la luz de la batalla por la defensa del Parque Andino Juncal, y también surge a partir de la defensa que ha hecho el alcalde Mauricio Quiroz del río Rocín».
«Hemos tenido la primera sesión de trabajo donde se han entregado una serie de planteamientos, delineamientos, más de treinta iniciativas que tienen que ver con constituir una reserva estratégica de agua dulce para el Aconcagua», planteó Mundaca.
Respecto a los acuerdos adoptados, el gobernador de Valparaíso dijo que «cada institución, cada organismo, cada organización, va a destinar un integrante para constituir una mesa de trabajo que haga síntesis y transforme la iniciativa en política pública para -precisamente- proteger todas las cabeceras de los ríos, todos los cuerpos de agua, pero también que esa política pública se transforme en una guía, en un camino, en un propósito de -finalmente- consagrar el agua como un bien común y como un derecho humano».
Por su parte, el alcalde de San Esteban, Christian Ortega, declaró que «hoy día estamos enfrentando la situación del parque Juncal, pero sin duda tenemos que trabajar pensando en el futuro, en la protección de toda la cuenca, de toda la cordillera y, por sobre todo, en las reservas de agua de la región de Valparaíso».
En la misma línea, su colega, Mauricio Quiroz, alcalde de Putaendo, agradeció la constitución de la comisión, manifestando que «cada día que pasa se van juntando más voluntades a la perspectiva de la protección de la cordillera, ya no solo de Putaendo, sino de la cordillera de todo el Aconcagua».
«Los proyectos mineros extractivistas que están amenazando la continuidad de las comunidades en estos territorios, y los recursos ecosistémicos de aquellos, efectivamente nos han unido. Ciframos buenas esperanzas y perspectivas en torno a poder generar una línea base de toda la cordillera de la región de Valparaíso e ir instalando distintos tipos de protección, ya sea a través de parques nacionales, los antiguos santuarios de la naturaleza. En rigor, que nos demos cuenta de que el agua, al ser un elemento estratégico para el desarrollo y para la vida, debe ser protegida», sostuvo el alcalde Quiroz.
Finalmente, Tomas Dinges, jefe de operaciones del Parque Andino Juncal, concluyó que «nosotros vemos hoy día una culminación de interés y colaboración de trabajar en conjunto sobre una reserva estratégica hídrica que partiría en el valle Juncal. De por sí sería súper positivo para poder garantizar la protección de los humedales, de los glaciares, de los ríos, y todo lo que otorga el agua prístina para el Río Aconcagua».
Seguiremos informando.