La Agrupación de Ingenieros Forestales por el Bosque Nativo (AIFBN) denunció ante la CONAF, una serie de malas prácticas realizadas por la empresa certificada con el Sello FSC Forestal Arauco, en el predio Santa Elisa ubicado en la comuna de La Unión, Región de Los Ríos.
En el monitoreo forestal independiente llevado a cabo por la AIFBN en el predio ubicado a orillas de camino que comunica La Unión – Santa Elisa y Corral, se observaron y registraron una serie de impactos ambientales como la eliminación y sustitución de vegetación nativa en cabecera de microcuenca y la corta de especies nativas, específicamente Robles con diámetros mayores a 40 cms. en bosquete remanente, sin la aplicación aparente de criterios silvícolas de intervención.
La denuncia fue ingresada en enero de 2014 al Sistema de Denuncia por Tercero a CONAF, cuyo personal revisó en terreno los antecedente tras lo cual cursaron una infracción por falta a la Ley de Bosque Nativo (20.283) y a los artículos 17 y 20 del Decreto Ley 701 por incumplimiento del plan de manejo.
Cabe destacar que estas denuncias coinciden con la visita del Sistema de Acreditación Internacional, ASI, entidad que realizará desde el 17 al 21 de marzo una auditoria a la empresa, tras la solicitud de diversas organizaciones no gubernamentales, quienes han mostrado su inconformidad con el proceso para que Forestal Arauco mantenga el Sello FSC.
La empresa, dentro de sus obligaciones para mantener este sello, debe cumplir un estándar exigente en temáticas legales, ambientales y sociales. “Aunque entendemos que el FSC es un proceso de mejora continua, Forestal Arauco debido a su gran patrimonio de más de un millón de hectáreas sigue realizando malas prácticas forestales, y esto puede dañar la credibilidad del sello”, manifestó la presidenta AIFBN, Pilar Cárcamo.
Malas prácticas
Además del impacto en la vegetación, la AIFBN denunció el uso de sistemas mecanizados en áreas de protección de cursos de agua, generando la pérdida y compactación de suelo y por consiguiente, afectando la cantidad y calidad del agua, del curso de agua permanente. También se constató cosecha en área con pendientes mayores a 45 % y en sentido perpendicular a las curvas de nivel, generando pérdida de suelo y un fuerte impacto sobre éste.
“Existen denuncias donde la vegetación del área de protección de los cursos de agua permanente ha sido intervenida o eliminada,evidenciando además, huellas de orugas de sistema mecanizado de cosecha en estas mismas áreas, con fuerte impacto en el suelo y la calidad del agua del curso involucrado”, agregó Cárcamo.
También se denunció eliminación de vegetación de área de protección de curso de agua permanente; eliminación y sustitución de vegetación nativa por especies exóticas, en cabecera de microcuenca y tala de árboles en pendiente de 100 %, sumando además el uso de sistemas mecanizados en áreas de protección de cursos de agua. “Todo esto genera en conjunto, la pérdida y compactación de suelo y afecta la disponibilidad y calidad del agua, y los cursos permanentes, de los cuales se benefician directamente comunidades rurales”, dijo Cárcamo.
“Creemos que el discurso del grupo Arauco, sobre su nueva forma de trabajar y cuidado ambiental, choca con sus arraigadas y reñidas prácticas y su débil compromiso con el manejo forestal sustentable”, finalizó la presidenta AIFBN.