Ley Corta de ISAPRES: salvataje de las ISAPRES a costa de sus afiliados
Por Javier Pineda
Las ISAPRES durante años cobraron de forma ilegal más de lo que tenían que cobrar a sus afiliados, principalmente a personas adultas mayores y a mujeres, a quienes se negaron de aplicar la tabla única de factores. La Corte Suprema les dijo a partir de noviembre de 2022 que tenían que devolver esos excesos cobrados ilegalmente a todos sus afiliados afectados, incluso a quienes no habían demandado.
En cumplimiento de esas sentencias, la Superintendencia de Salud señaló que la deuda alcanzaba los $1.400 millones de dólares, pero luego ajustaron la cifra a $1.180 millones de dólares. Las ISAPRES dijeron que si cumplían con la sentencia quebraban, por lo cual comenzaron con el chantaje para que el Congreso legislaran una “Ley Corta” que los salvara.
El gobierno acudió en su ayuda y constituyó una “mesa técnica” integrada por representantes de las ISAPRES y de los partidos políticos. Estos propusieron una serie de medidas. El gobierno acogió dos que son problemáticas para los usuarios: autorización para pagar en cuotas que pueden durar varios años y autorizó a las ISAPRES a aumentar el precio de sus planes. Esto significa que al final traspasan el costo de la deuda a los afiliados de las ISAPRES.
En la tramitación legislativa la derecha fue más allá y propuso la “mutualización”, lo cual permitía reducir la deuda de las ISAPRES casi a la mitad. Esta norma fue impugnada ante el Tribunal Constitucional, el cual la declaró inconstitucional porque se trataba de una materia de iniciativa exclusiva del Presidente de la República, por lo cual los congresistas no podían plantear una medida así.
Después de ello, la tramitación de la ley continuó en la Comisión Mixta. Y en esta se ratificó gran parte de lo propuesto por las propias ISAPRES: un plazo de 13 años para pagar la deuda y un plazo de 3 años para que apliquen una subida de precios superando los límites que tienen actualmente. Sólo falta ratificación de esta propuesta por las salas de la Cámara de Diputados y del Senado, lo cual debiese ocurrir a principios de la próxima semana.
En definitiva, las ISAPRES pueden pagar su deuda en más de 150 cuotas y con la plata extra que le cobrarán a todos los afiliados durante 3 años podrán hacer caja. Aún así, se quejan con que el negocio no está garantizado y que se mantendrá inestable en los próximos años.
Esta medida cuenta con el apoyo del Gobierno, quienes dicen actuar “responsablemente” cuando no hacen más que garantizar un negocio fallido que debiese desaparecer. En lugar de poner la lápida a las ISAPRES, concurren en su salvataje.