Un día después de cumplirse siete meses del inicio del genocidio de la población palestina en la Franja de Gaza por las fuerzas israelíes, la comunidad internacional volvió a dar otro espaldarazo al país árabe. Por una abrumadora mayoría, de 143 de los 193 países miembros (73,57%) votaron a favor de una resolución que admite a Palestina como un Estado observador de la ONU.
143 países votaron a favor, 9 rechazaron la iniciativa, incluyendo Argentina, EE.UU. e Israel, mientras que 25 se abstuvieron
La resolución había sido presentada por Emiratos Árabes Unidos y fue copatrocinada por España, Noruega, Irlanda, Bélgica, además de otros setenta estados, entre los que estaba Chile.
El copatrocinio de países europeos da cuenta de como el tema palestino divide a la Unión Europea, en donde países como Irlanda y Bélgica han sido los más audaces en denunciar los crímenes que comete Israel en la Franja de Gaza.
En tanto, entre los 25 países que se abstuvieron, llama la atención que gran parte de estos se exhiben en las políticas internacionales como representantes del mundo libre y promotores de los derechos humanos.
Así resultan contradictorias con tal presentación promovida por los grandes medios, de países como Canadá, Alemania, Reino Unido, Austria, Italia, Suecia, Finlandia, Reino de los Países Bajos (Holanda) y Suiza, países que se abstuvieron.
Los otros países que tomaron palco fueron Albania, Bulgaria, Croacia, Fiji, Georgia, Latvia, Lituania, Malawi, Islas Marshall, Mónaco, Macedonia del Norte, Moldavia, Paraguay, Rumania, Vanuatu y Ucrania.
Países instalados por los medios como ‘enemigos de los valores occidentales’, como Rusia, Irán, Corea del Norte y China votaron a favor de la inclusión de Palestina en la ONU.
LOS QUE QUEDARON MAL
Nueve países votaron en contra de incorporar a Palestina. Además de Israel, cuyo embajador protagonizó una rabieta tras conocerse el resultado, no apoyan la aceptación de una Palestina soberana e independiente, República Checa, Estados Unidos, Hungría, Micronesia, Nauru, Palau, Papua y Argentina.
Estados Unidos es el aliado histórico de Israel, entidad territorial que es la base de su presencia en medio oriente, en medio de otros países árabes afines más por pragmatismo y prebendas, que por compromiso ideológico. La nación del norte también es la que más suministra armas a Israel para mantener el genocidio en Gaza, además de haber boicoteado con su veto dos resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, que pedían un inmediato cese al fuego.
El nuevo aliado de Israel es Argentina, lo que marca un quiebre en la política exterior hasta ahora mantenida por sus gobernantes. Dicho apoyo es sostenido por el gobierno de Javier Milei, quien en abril de 2024, a poco de asumir como presidente, fue a Miami, Estados Unidos, junto a su hermana, Karina Milei, para recibir el reconocimiento ‘Embajadores Internacionales de la Luz’, otorgado por la organización sionista ortodoxa Jabad Lubavitch, quienes lo premiaron por “su inquebrantable dedicación a difundir la libertad” y “sus incansables esfuerzos por Israel y la comunidad global”.
También Milei designó como embajador argentino en Tel Aviv al rabino ortodoxo Axel Wahnish.
¿QUE IMPLICA SER UN ESTADO OBSERVADOR PERMANENTE?
La aceptación de Palestina como miembro observador permanente se originó cuando el 2 de abril reciente, delegados del país árabe enviaron al Secretario General de la ONU, António Guterres, una carta que solicitó reconsiderar la petición de admisión de Palestina como miembro de la ONU, presentada originalmente en 2011.
Guterres el 8 de abril remitió la solicitud al Consejo de Seguridad, integrado por 15 miembros, ya que se necesita un acuerdo entre ésta instancia y la Asamblea General de la ONU para admitir nuevos Estados miembros. La propuesta generó el rechazo de los representantes de Estados Unidos, quienes vetaron el 18 de abril la resolución.
El argumento del embajador adjunto de Estados Unidos, Robert Wood, fue que “no hay unidad entre los miembros del Consejo de Seguridad» sobre si el solicitante «cumple los criterios de admisión de nuevos miembros, principalmente si cumple el criterio de ser un Estado”.
En la ocasión, de los miembros del Consejo de Seguridad, 12 países votaron a favor, como Rusia y China; en tanto que Reino Unido y Suiza se abstuvieron.
La condición de Estado Observador Permanente en la ONU, si bien no es lo mismo que el resto de los Estados con derechos plenos, implica poder participar en todos los procedimientos de la Organización, a excepción de la votación de proyectos de resolución y decisiones en sus principales órganos y organismos.
En la jornada, el embajador palestino, Riyad Mansour, sostuvo que hoy la bandera palestina “vuela alto y con orgullo en Palestina y en todo el globo y en el campus de la Universidad de Columbia”.
Luego, con la voz quebrada, reclamó el derecho a un Estado palestino que “no puede depender del veto de Israel ni es negociable”, y subrayó que el voto tenía un carácter histórico.
Por su parte, el representante israelí, Gilad Erdan, protagonizó una simbólica performance durante la sesión, destruyendo con una trituradora de papel la Carta de la ONU, repitiendo el discurso propagandístico de décadas, al decir que la ONU había dado la bienvenida a un «Estado terrorista”.
El único otro Estado observador no miembro de la organización de naciones es la Santa Sede, en representación del Vaticano.
El Ciudadano
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