En abril pasado, el médico Diego Manzur fue formalizado en San Fernando por el delito de femicidio frustrado contra su esposa y madre de sus tres hijos, sin embargo, pese a quedar en prisión preventiva, logró salir a fines de mayo por un tecnicismo jurídico, según informó El Tipógrafo.
Lo paradójico vino después, cuando Manzur a los días de haber abandonado la prisión, fuera sorprendido in fraganti mientras intentaba incendiar el local su anterior víctima.
Con todos estos antecedentes, fue formalizado por los delitos de robo en lugar no habitado, desacato e intento de incendio, sin embargo, sólo quedó con arresto domiciliario total en la comuna de Vitacura.
En paralelo, el tribunal dictaminó la prohibición de entrar a la comuna de San Fernando, además de la prohibición acercarse a la víctima su lugar de trabajo, contactarla a través de terceros y acercarse a los lugares en que habitualmente concurre, detalló el medio.
Sin embargo, la justicia ignoró el historial delictual del imputado y estableció 75 días como plazo de investigación.
Según informa El Tipógrafo, Manzur fue interceptado por funcionarios de carabineros, luego de haber llegado hasta el centro médico «Novamédica», propiedad de la víctima, con un arma de aire comprimido. Al interior del recinto se encontró un bidón con 40 litros de combustible que el médico ya había dejado con anterioridad, con la clara intención de incendiar el lugar.
Bajo ese contexto, varias organizaciones feministas han criticado la decisión del tribunal, pese a que la Fiscalía solicitó la prisión preventiva para el imputado, a la jueza de garantía no le pareció pertinente.
La propia diputada Marcela Riquelme se refirió al respecto en su cuenta de «X», «¿Qué más espera la justicia en Chile?», señaló. «Claramente, no todos los tribunales del país fallan con perspectiva de género!», subrayó.