La minera Anglo American, con sede en Londres, demandó a Venezuela por la cancelación de concesiones mineras, efectuadas durante el gobierno de Hugo Chávez, ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) del Banco Mundial, por unos 45.000 millones de dólares. Los mayores reclamos son los de las petroleras estadounidenses Exxon Mobil y Conoco Phillips.
Anglo American, una de las mayores mineras del mundo, fue propietaria del 91,4 por ciento de la mina Loma de Níquel en Venezuela hasta el año 2012 cuando el Gobierno del fallecido Hugo Chávez le canceló 13 concesiones y se negó a renovarle otras tres, informa Reuters.
La minera es un gran productor de diamantes en África, además de cobre, níquel, hierro, carbón y el mayor productor mundial de platino, con alrededor del 40 por ciento de la producción mundial.
El arbitraje fue admitido por el Ciadi el jueves, pero el tribunal dependiente del Banco Mundial no dio más detalles.
En el 2012, Hugo Chávez solicitó oficialmente abandonar el CIADI, órgano del Banco Mundial, con sede en Washington. Chávez, señaló entonces que Venezuela no aceptaría ninguna resolución del tribunal arbitral.
CRITICAS AL CIADI
El CIADI ha sido fuertemente criticado por diversas organizaciones que consideran que su posición tiende a beneficiar solo a las empresas. Uno de los principales argumentos para sostener esto es la base jurídica que el propio CIADI toma para la resolución de las demandas que le son presentadas ante él: los tribunales arbitrales constituidos por el CIADI solamente consideran los tratados bilaterales de protección de inversiones y el Convenio de Washington de 1966, que constituye a éste organismo, para resolver las causas, dejando de lado toda otra normativa existente, aunque sean éstas leyes internas del Estado receptor de la inversión, incluyendo las propias Constituciones Políticas de los Estados o la normativa proveniente del Derecho Internacional Público, que incluye por ejemplo, los Derechos Humanos.
Por ello, países como Bolivia (en el año 2007), Ecuador (en el año 2009) y Venezuela (en el año 2012) han tomado la decisión de denunciar el convenio constitutivo, es decir el Convenio de Washington de 1966, y retirarse del organismo perteneciente al Banco Mundial.
Por su parte Anglo American, también ha recibido duras críticas, por su política con respecto a varios estados, especialmente de África. Anglo American es propietaria del 45% de la firma Sudafricana de diamantes De Beers.
Por ejemplo, se le acusa de haber incitado al gobierno de Botswana a presionar a los bosquimanos a abandonar sus tierras incluso por la fuerza, a fin de poder explotar las reservas de diamantes que existen en sus territorios.
De Beers, que forma parte de Anglo American, ha sido también acusada de haber promovido el tráfico de los diamantes de sangre, el cual se encuentra en el origen de la Guerra Civil de Sierra Leona.
Por David Rubinstein
El Ciudadano