Una encuesta realizada por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) arrojó que la discriminación por motivos de orientación e identidad sexual sigue siendo una triste realidad en nuestro país: según los datos entregados por la organización, el 80,9% de los encuestados reportó haber sido víctima de discriminación por estos motivos al menos una vez en la vida.
Los datos responden a la Segunda Encuesta Nacional sobre Diversidades y Discriminación realizada por el Movilh, la cual fue aplicada a 4.442 personas LGBTIQ+, convirtiéndose en el sondeo más representativo de la comunidad a la fecha.
De acuerdo a los resultados de la encuesta, el 80,9% de las personas pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+ reporta que ha vivido al menos una vez en su vida discriminación en razón de su orientación sexual o identidad de género, versus el 19,1% que jamás ha experimentado ese problema.
En tanto, el 56,7% señala haber sufrido discriminación en el último año. Del total, en el último año el 32,4% vivió la discriminación solo una vez, el 16,9% mensualmente, el 4,6% semanalmente y el 2,8% a diario.
En específico, el 70,2% de quienes han sido víctimas de discriminación señalan que ésta se expresó como «burlas o insultos»; seguido por «obstáculos para mi libertad de expresión» (46,9%), «agresiones psicológicas» (42,9%), amenazas (18,8%), «obstáculos para acceder a servicios o productos ofrecidos por instituciones públicas» (11%), «agresiones físicas» (10,7%), «obstáculos para acceder a servicios o productos ofrecidos por instituciones privadas» (10,1%) y abuso sexual (10,1%).
A su vez, el 56,6% identifica como responsables de la discriminación a desconocidos, seguidos por familiares (43,4%), compañeros/as de estudios (35,7%), compañeros/as de trabajo (19%), «vecinos o personas cercanas a mi barrio» (16,8%), docentes o directivos de establecimientos educacionales (15,8%), jefes o superiores del trabajo (10,9%), personal de salud (8,6%), carabineros (8,4%), trabajadores de instituciones privadas (7.9%), funcionarios de instituciones públicas (6,4%), PDI (2,4%), defensores públicos (1,1%) y fiscales (0,8%).
Grados de libertad
La encuesta también arrojó que el 60,4% de las personas de la comunidad LGBTIQ+ viven su sexualidad “con alguna libertad, pero no total” y el 36,8% lo hace “de manera totalmente libre”. En tanto, solo el 2,8% declara que vive su orientación sexual o identidad de género sin ninguna libertad.
Como consecuencia, el 38,6% dice que no se abstiene de expresar en público su orientación sexual o identidad de género (el 11,8% nunca lo ha evitado y el 26,8% antes lo evitaba, pero ya no), mientras el 48% “a veces” evita expresarse y el 13,4% “siempre” lo hace por temor a agresiones, acosos o amenazas. Muy vinculado a ello, el 49,1 % no se abstiene de visitar ciertos lugares por temor a agresiones (el 28,9% nunca se abstuvo y el 20,2% antes lo hacía, pero ya no), mientras el 41,2% solo “a veces” lo hace y el 9,7% “siempre”.
Respecto a las creencias religiosas, el 64,3% dice no tener ninguna religión o credo, el 21% se declara católico; el 3,8% evangélico o protestante; el 1,4% budista; el 0,8% mormón; el 0,2% judío y el 8,5% “otra”.
En cuanto a la tendencia política-ideológica el 48,7% no adhiere a ninguna. En tanto, 35,2% se declara de Izquierda (el 19,9% de izquierda; el 14,1% de centro-izquierda y el 1,2% de extrema izquierda), el 9,8% de Derecha (5,3% de derecha; 4,3% de centro derecha y 0,2% de extrema derecha) y el 6,3% de Centro .
El balance del Movilh
Desde el Movlih destacaron que la encuesta aportó datos inéditos respecto a las condiciones en las que viven las personas LGBTIQ+ del país. Sin embargo, también alertaron sobre el recrudecimiento de la discriminación que aún afecta a este sector de la población.
«Desde la primera encuesta nacional el país ha cambiado radicalmente, en muchos casos para mejor. A la generación de leyes y políticas públicas, se suma la expresión de la diversidad LGBTIQ+. Por ejemplo, a diferencia de hace 11 años, ahora hay personas que se identifican como no binarias, pansexuales o asexuales, conceptos que antes eran poco y nada usados o conocidos», señalaron desde la organización.
«En los últimos dos años se aprecia un recrudecimiento de la discriminación que erosiona los avances y mantiene vulnerables a las personas LGBTIQ+, en especial a niños, niñas y adolescentes, pues la mayoría, un 67%, sufre los primeros abusos en razón de su orientación sexual o identidad de género antes de los 18 años (…) Sin duda usaremos los resultados del sondeo para sensibilizar a la ciudadanía y seguir incidiendo en la creación o perfeccionamiento de leyes y políticas públicas anti-discriminatorias», añadieron.