Francia celebró el pasado domingo 30 de junio la primera vuelta de las elecciones legislativas que adelantó el presidente Emmanuel Macron. Ahora este 7 de julio vivirá la segunda vuelta pues ningún candidato obtuvo más del 50% de los votos válidos y al menos el 25% de los votos del total de electores registrados.
El partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en francés) quedó muy cerca del poder con alrededor del 33% de los votos y con Marine Le Pen como líder.
Mientras que la coalición de izquierda Nuevo Frente Popular (NFP) alcanzó el 28% de los votos, y la de Macron, Ensemble, obtuvo cerca del 21%, reseñó BBC Mundo.
Jean-Yves Dormagen, fundador del laboratorio de opiniones Cluster17, presenta algunos puntos de análisis antes del domingo:
- El frente republicano funciona bien. Ha funcionado porque la narrativa de una toma de poder del RN se ha arraigado muy fuertemente en la opinión pública antes de la primera vuelta, pero sobre todo desde la primera vuelta.
- En este contexto, las transferencias de votos son especialmente buenas por parte de los votantes de NFP hacia los candidatos de Ensemble. La izquierda podría, paradójicamente, salvar el centro. Un dato importante para la próxima semana.
- El escenario más probable sigue siendo una mayoría relativa del RN, pero con una ventaja muy estrecha y una dispersión en tres bloques de tamaño casi idéntico.
- No podemos excluir un escenario en el que el RN no tenga la mayoría relativa y donde la izquierda lo supere.
- LR (Los Republicanos) se mantiene adecuadamente alrededor de 40 diputados, ellos también elegidos en parte gracias al voto «barrera».
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