El Tercer Juzgado de Letras de Iquique acogió la demanda de indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual deducidos en contra del centro ecreacional Rancho Kokoye y la dueña de un perro, por los padres de un niño que fue mordido por el animal. Accidente registrado en la localidad de La Huayca, en julio de 2022.
En el fallo, el juez David Sepúlveda Cid, determinó que tanto el propietario del recinto como la dueña del perro son responsables de las lesiones sufridas por el niño, ya que el animal fue mantenido sin el resguardo necesario, infringiendo la Ley de Tenencia Responsable, por lo que les ordenó pagar solidariamente una indemnización total de $20.288.430 a sus padres.
Según el dictamen, el incidente ocurrió el 24 de julio de 2022 cuando el niño, quien estaba en el centro recreacional con sus padres, fue mordido en la mejilla, labios y extremidades, requiriendo atención médica y tratamiento antirrábico.
«En cuanto a la existencia de un hecho ilícito, que los actores hacen consistir en la omisión culposa en que habría incurrido el demandado, debido a la falta del debido cuidado y de las condiciones óptimas de tenencia de un animal doméstico, y que habría generado el ataque del perro al menor, siendo este mordido en mejilla, labios y extremidades», indicó.
«Es posible establecer que el 24 de julio de 2022, al interior del ‘Rancho Kokoye’, ubicado en la localidad de La Huayca, comuna de Pozo Almonte, y de propiedad del demandado, el niño (…), de 6 años de edad, sufrió múltiples heridas de carácter menos graves a raíz del ataque de un perro de nombre Max, debiendo recibir atención médica de urgencia a fin de curar y suturar sus lesiones, además de suministrarle tratamiento antirrábico, asistiendo a vacunaciones y curaciones los días siguientes al suceso», sostiene el fallo.
El Juzgado concluyó que la omisión de resguardar al animal en condiciones adecuadas influyó en el ataque, especialmente al encontrarse el perro en un ambiente desértico y expuesto al calor.
“Ello queda en evidencia de las capturas de pantalla agregadas al documento denominado ‘Informe sucesos del accidente mordedura de perro’, agregado a folio 63, y del Acta de la Seremi de Salud referida precedentemente (…), permiten advertir que el can graficado se encontraba amarrado, expuesto al calor y al sol, en una localidad que, es un hecho público y notorio, se caracteriza por ser una zona desértica y de calor extremo, contexto que es presumible haya influido en el comportamiento del animal, quien al ver a un niño acercarse, invadiendo su espacio, provocó su reacción violenta traducida en mordidas, provocándole al menor las lesiones descritas en el considerando precedente”, planteó el tribunal en su fallo.
El Tercer Juzgado de Letras de Iquique ordenó los demandados a pagar solidariamente una indemnización total de $20 millones de pesos, considerando los daños físicos y psicológicos causados al menor y el perjuicio moral sufrido por la familia.