8 DE DICIEMBRE DE 2024. Grupos opositores al régimen que hasta hace unas horas era el gobierno de Siria han proclamado el fin absoluto del régimen de Bashar al-Ásad, quien fuera presidente de ese país desde el año 2000, cuando sucedió en el cargo a su padre, Hafez Al-Ásad, quien a su vez gobernó desde 1971.

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La abdicación toma lugar tras 13 años de sangrienta civil entre múltiples facciones militares y paramilitares que hasta el díia de hoy siguen debatiendo el modelo de estado teocrático que se desea imponer en Siria.

El conflicto, como toda guerra proxy, ha sido alimentado por potencias que han armado a las facciones, apostando a mantener proximidad con el poder que se instituya en Siria, dada la relevancia que la región tiene en materia económica, militar y geopolítica.

La toma de Damasco se habría vuelto una realidad irreversible para el gobierno de Bashar Al-Ásad tras la veloz consoldación del control de la Coalición Rebelde en Aleppo durante esta semana, así como la captura rebelde del aeropuerto y los canales nacionales de televisión. Además, las negociaciones entre el gobierno y la oposición no habían prosperado.

Según ha trascendido, Al-Assad huyó hace algunas horas de Damasco, presumiblemente en un vehículo aéreo a su disposición en el Palacio de Gobierno, con dirección a Moscú, a casi tres mil kilómetros de distancia de la capital de Siria, donde los edificios que albergaban cortes militares ya han comenzado a arder.

De acuerdo a la cadena de televisión RT (Russia Today), el hoy expresidente ya desembarcó en Moscú y gozará de inmunidad y protección por parte del gobierno ruso.

Nuevos liderazgos políticos se insunúan entre altos mandos de la Coalición Siria

Tras la la salida del hoy expresidente, en el instante de encrucijada en que algunos ya han ingresado al Palacio de Gobierno en busca de objetos que saquear, Siria enfrenta un peligroso vacío de poder institucional, que algunos actores visibles en en la facción rebelde ya desean ocupar con sus propias personas o aliados.

Enm este momento, la facción rebelde con mayor visibililidad internacional se llama Hayat Tahir-Al Sham, que fue el que aportó mayor cantidad de fuerzas y diseño logístico al defenestramiendo de Al-Bashad. En este grupo islamista, destaca el nombre de Abu Mohamed Al-Julani quien se encuentra otorgando declaraciones a los medios de comunicación y goza en el momento presente de la mayor cantidad de credenciales para convertirse en el próximo presidente de Siria.

Al-Julani, de famlia Siria pero nacido en Arabia Saudita, formó parte de la milicia Al-Quaeda, por lo que fue arrestado en 2016 en Irak por fuerzas estadounidenses. Al Quaeda es una organización paramilitar yihadista, ideológicamente encuadrada en el salafismo-wahabismo (consagrada a su versión de ‘guerra santa’), promovida en sus orígenes por Osama Bin Laden. El objetivo último de Al-Quaeda es el establecimiento de la ley sharia bajo los preceptos sunitas del Islam; es decir, el establecimiento de un califato. Una de las misiones que impulsó a Abu Mohamed Al-Julani a la prominencia fueron sus esfuerzos para fundar la fillial de Al-Quaeda en Siria, misma que vio la luz bajo el nombre de Al-Nusra, que no tardaría en verse conceptualizado por organismos internacionales como grupo terrorista, al igual que Añ-Quaeda.

Además de otros frentes islámicos cuya visión diverge del salafismo-wahabismo, en la coalición rebelde siria también se encuentran el pueblo kurdo, grupo étnico que fue perseguido tanto por el régimen de Al-Assad como por el de Erdogan, en Turquía, tal como lo refirió el portavoz de los kurdos durante la temporada más crítica para la supervivencia kurda: cuando además del gobierno sirio y el gobierno turco, debieron enfrentar con las armas al Estado Islámico. La mayoría de los kurdos son musulmanes suníes perfenecientes a adscripciones sufís, y también existen millones de kurdos chiitas. Los kurdos se consideran una nación, y desde siempre han querido separarse de Siria, a lo que algunos líderes turcos, como Erdogan, se oponen terminantemente. En el territorio controlado por los kurdos se localizan la mayor parte de las reservas petrolíferas de Siria.

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