¡La CIA te vigila!: Zuckerberg confirma que agencias de inteligencia pueden leer tus mensajes de WhatsApp

En un giro impactante para la privacidad de los usuarios, el CEO de Meta, Mark Zuckerberg, confirmó que las agencias de inteligencia estadounidenses, como la CIA y la NSA, podrían tener acceso a la correspondencia de los usuarios de WhatsApp mediante técnicas de hackeo, a pesar del cifrado de extremo a extremo que protege las comunicaciones.

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Zuckerberg aseguró que ni Meta ni otras empresas tecnológicas tienen la capacidad de leer los mensajes debido a las estrictas políticas de cifrado. Sin embargo, planteó un escenario preocupante: la vulnerabilidad no está en la infraestructura de WhatsApp, sino en los propios dispositivos de los usuarios, que podrían ser hackeados por estas agencias de inteligencia utilizando sofisticadas herramientas como el programa Pegasus.

Este tipo de declaraciones no solo abren interrogantes sobre los límites de la privacidad digital en la era moderna, sino también sobre el papel de las grandes corporaciones tecnológicas y su relación con los gobiernos. La afirmación de que la administración de Joe Biden presionó duramente a Meta para censurar información durante la pandemia de covid-19, al punto de recurrir a amenazas, deja en evidencia un conflicto latente entre las plataformas digitales y el control estatal sobre el flujo de información.

El comentario de Zuckerberg sobre el acceso potencial de la CIA y la NSA a los dispositivos de los usuarios lleva la preocupación sobre la vigilancia estatal a un nuevo nivel. Aunque las plataformas aseguran que los mensajes están encriptados, la posibilidad de que estas agencias puedan acceder directamente a los dispositivos mediante hackeos o software espía como Pegasus deja claro que la seguridad no es impenetrable.

Esta revelación alimenta los temores sobre el abuso de poder por parte de los gobiernos y plantea dudas sobre si las plataformas realmente protegen la privacidad de sus usuarios o si, al final, los ciudadanos están desprotegidos ante las intenciones de los Estados.

Zuckerberg también se refirió a la relación tensa entre su compañía y la administración Biden, que, según el empresario, ejerció fuertes presiones para eliminar información que consideraban «peligrosa», pero que a menudo resultaba ser verdadera. Este tipo de injerencia gubernamental, especialmente en temas sensibles como la pandemia, abre un debate más amplio sobre la censura, la libertad de expresión y hasta qué punto las grandes tecnológicas deben ceder ante las exigencias políticas.

Esta tensión entre Meta y el gobierno estadounidense pone de relieve un conflicto cada vez más común en el mundo digital: la lucha entre la libertad de expresión en plataformas globales y los intentos de los gobiernos por controlar la narrativa pública, una tendencia que no solo afecta a EE. UU., sino que también se ve en otros países.

La confesión de Zuckerberg no puede tomarse a la ligera. Los usuarios de WhatsApp y otras aplicaciones de mensajería cifrada podrían verse en la encrucijada de confiar ciegamente en que sus datos están seguros o aceptar la realidad de que ninguna tecnología es completamente invulnerable frente a los recursos ilimitados de las agencias de espionaje estatales.

Si bien los comentarios del CEO de Meta parecen señalar una resignación ante el poder de los gobiernos para intervenir en la vida privada de los ciudadanos, también es una llamada de atención para repensar la seguridad digital y exigir mayores controles sobre las acciones de las agencias de inteligencia, que cada vez parecen más dispuestas a cruzar límites en nombre de la «seguridad nacional».

Foto: Redes

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