El diputado Joaquín Lavín Jr. quedó en el centro de la polémica tras un reportaje televisivo que lo expuso en plena crisis política y personal. Actualmente enfrenta la suspensión de su militancia en la UDI, luego de que la Fiscalía abriera una investigación en su contra.
Lavín Jr., esposo de la exalcaldesa Cathy Barriga —formalizada por uno de los casos de fraude municipal más grandes del país—, es indagado por presunto tráfico de influencias y fraude al Fisco. En ese contexto, su oficina parlamentaria fue allanada por orden judicial, tras ser vinculado a la emisión de boletas falsas. A pesar de todo, el diputado ha evitado dar explicaciones públicas a sus electores.
Pese a haber sido elegido en 2021 con el 7,04% de los votos en el Distrito 8, Lavín Jr. ha guardado silencio frente a quienes depositaron su confianza en él. Esta negativa se evidenció cuando una periodista de Mega lo abordó a la salida del Centro Penitenciario Femenino, donde se encuentra recluida su esposa, haciéndole una pregunta directa:
—¿Por qué se niega a hablar con nosotros? —le planteó la comunicadora.
El parlamentario respondió tajante:
—¿Qué gano yo con sentarme en su programa?
La periodista replicó que podía «contar su versión, explicarle todo a la gente», pero Lavín Jr. insistió en su posición:
—Ya he hablado muchas veces…
—Usted tiene una responsabilidad con la gente —le recordó la reportera.
El diputado zanjó el intercambio con una frase que generó controversia:
—¿Qué me importa a mí explicarle a la gente?
Hasta ahora, Lavín Jr. ha evitado conceder entrevistas para aclarar su situación judicial. Mientras tanto, el reportaje de Mega reveló que su desafuero como diputado podría ser inminente, allanando el camino para que sea formalmente acusado por delitos graves.
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