¿Cómo empezó el apoyo de los sauditas a los radicales?
Con el objetivo de expulsar a los infieles de la tierra de los musulmanes, Arabia Saudita empezó a financiar a los grupos islamistas en Afganistán en su lucha contra el Ejército soviético en 1979, afirma Alain Rodier, director del Centro Francés de Estudios sobre la Inteligencia y experto en el tema del terrorismo islamista y la delincuencia organizada, en una entrevista al periódico francés ‘Atlantico‘.
«Lo hicieron en conjunto con Pakistán, pero posteriormente financiaron a otros radicales, incluyendo a los que se oponían al mismo Islamabad. Además, van construyendo mezquitas por todo el mundo islámico para expandir su influencia y oponerse a Teherán (Irán) y, anteriormente, a los Hermanos Musulmanes», recuerda Rodier.
La ideología del wahabismo «se diferencia muy poco del salafismo adoptado por Arabia Saudita: Riad solo es algo más pragmático», afirma el experto.
¿Amenaza el Estado Islámico a Arabia Saudita?
El Estado Islámico, como su predecesor Al Qaeda, considera a la familia real saudí «corrupta y subordinada a EE.UU. e Israel». Intenta derrumbar su regimen, aunque por el momento el califato tiene otras prioridades como fortalecerse en Irak y Siria, y expandirse al Líbano, Jordania y la península del Sinaí, afirma Alain Rodier.
«Es un objetivo a largo plazo. Los árabes tienen una percepción del tiempo diferente: los niños a quienes vemos en las filas de los yihadistas continuarán la lucha de sus padres, quienes ni siquiera esperan conseguir la victoria durante su vida», explica el experto.
Aunque las instituciones oficiales decidieron frenar por el momento el apoyo de los grupos más radicales, existe una gran cantidad de personas que simpatizan con los wahabitas y les financian con sus propios fondos, según el analista. «Muchos de los patrocinadores más ricos permanecen no en Arabia Saudita, sino en Kuwait, y algunos de ellos no tienen mucho respeto hacia el régimen saudita vigente», advierte Rodier.
¿Son responsables de la crisis los aliados occidentales de Arabia Saudita?
La posición selectiva de los organismos de Occidente en cuanto a los derechos humanos en los países de Oriente Medio llevó a la desestabilización de un grupo de estados, según el analista. «Occidente nunca comentó el incumplimiento de las ‘reglas democráticas’ en Arabia Saudita». «En mi opinión, los líderes occidentales actúan por emoción, no piensan ni un momento en las consecuencias a largo plazo», concluye Alain Rodier.
Fuente: Actualidad RT