La idea del presidente José Mujica de reasentar a familias sirias en Uruguay empezó a repercutir en otros países de América Latina que se interesaron en ayudar.
La propuesta surgió luego que el canciller charrúa, Luis Almagro, en un viaje por Jordania, viera la realisad de un campo de refugiados donde viven miles de personas que escaparon de la guerra en Siria.
Michelle Alfaro, oficial regional de protección del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), comentó a El Observador que el paso que dio Uruguay es visto como “un buen ejemplo” por otros países. Señaló que, tras la decisión de Uruguay, al menos tres naciones de América Latina –no especificó cuáles– se acercaron al organismo con sede regional en Buenos Aires, interesados también en reasentar personas de zonas de conflicto.
La forma de recibirlos puede ser “reasentándolos” –es decir traer a gente que ya tiene el estatus de refugiado en otro país– o mediante el mecanismo de “visa humanitaria”, que es el que utiliza Brasil y por esa vía ya recibió a unos 4.200 sirios.
El gobierno de Uruguay ajusta ahora los detalles finales para el arribo al país de 120 sirios, la mayoría menores, que llegarán en dos tandas. El primer grupo de 40 personas vendrá a fines de setiembre y los 80 restantes en febrero de 2015.
Todos ellos se encuentran actualmente en el Líbano, al que llegaron luego que sus casas fueron destruidas por bombas en los enfrentamientos entre la dictadura de Bachar al Asad y fuerzas insurgentes.
Fuente: El Observador, Uruguay