Los que llegaban iban a ver el documental, pero sabían que la cosa llevaba un aperitivo musical. Una serie de músicos que de una u otra manera estaban ligados al trabajo de Subversive Action Films, los responsables de La Conspiración de Chicago. Los que se presentaron esa noche tenían que ver con la realización porque ellos crearon o entregaron sus temas para la banda sonora del filme, salvo Rocío Peña, una invitada desde Concepción. Y la selección fue muy acertada, ya que los participantes no sólo son un reflejo de la idea de fondo que tiene el documental, sino que ellos mismos han sido parte de esa experiencia, sus actuaciones y trabajo tienen que ver con las poblaciones, con la gestión de las comunidades mapuches o con el hacer un trabajo para los niños y la educación popular.
Por eso aquella noche, de mucha gente, en el Cine Arte Normandie, fueron presentándose con dos o tres temas cada uno, aquellos que debían estar ahí. Partiendo por la mencionada Peña, invitada de Kaskivano, quién luego saltó a escena, cargando de energía y fuerza el ambiente, tal como lo comentó más tarde Subverso. Y es que Kaskivano toca la guitarra como si fuera su arma, como si fuera la última cosa que fuera a hacer, entregando una potencia que lo distingue y lo hace armonizarse con sus ideas. Así entregó, por ejemplo, “Rojos de sangre”, una pieza donde el cruce entre el decir y el tocar se hacen una sola punta que te va pinchando en cada frase y en cada acorde.
Subverso sube a continuación, y las ideas fluyen en el mismo sentido, cambiando la guitarra por las bases, permitiendo que “Infórmate” y “Vamos” no sólo saquen aplausos y vítores, sino que enciende un poco más, la a esa altura ya noche de Santiago centro. Pero Subverso no sólo lo dice en su rap, sino que lo plantea en sus dichos, que luego se reflejarán también en el documental, que son parte de la otra conspiración, la que se hace desde las calles y poblaciones de Chile.
El escenario recibe a Melómanos Rap, grupo de la población La Victoria, que hizo el tema central del filme (“Legado”), y que desplegó en escena parte de su propuesta, que se nutre de sus vivencias, de sus mirada de los dolores y sufrimientos diarios, y de las ganas de mover y activar la subversión. Rematan, antes de ver el documental, Salvaje Decibel, que con formación completa, hizo lo que sabe hacer y que se refleja en su disco “Poblacional”, donde se plasman su mirada libertaria, su anhelo de mover las cosas y las miradas en las direcciones donde el sistema no quiere que lo hagas, y donde realmente se fraguan los cambios, y no en los edificios y estructuras del poder. En luchas de calles y de esas “Casas bajas”, que habitan los que para algunos que ostentan su poder, “son esos desquiciados”.
¿Cuándo y dónde fue?
1 de septiembre
19 horas
Cine Arte Normandie
Tarapacá 1181
Texto: Jordi Berenguer
Foto: Evelyn Cazenave
Onda Corta
El Ciudadano