Decenas de personas se concentraron en la West Florissant Avenue, zona de las manifestaciones desde el pasado 9 de agosto, cuando el agente Darren Wilson ultimó de seis balazos al adolescente desarmado de 18 años.
Según la Policía la jornada de la víspera transcurrió sin incidentes, lo que se asocia a la visita el miércoles a ese suburbio de San Luis del secreatrio de Justicia, Eric Holder, consideran algunos observadores.
El presidente Barack Obama, quien no ha expresado aún cuándo viajará a Ferguson, envió a Holder allí para reunirse con líderes comunitarios y funcionarios del Departamento de Justicia para que realicen un examen de posibles violaciones de los derechos civiles vinculados al caso.
Ahora hay cierta calma en la localidad después de días de represión con gases lacrimógenos, balas de goma, equipos antimotines y otros medios, que dejaron un saldo de decenas de arrestos -incluidos periodistas-, heridos y otro joven negro acribillado en San Luis por la policía en un incidente no relacionado, cuyas circunstancias se investigan.
El gobernador de Missouri, Jay Nixon, que movilizó el lunes a la Guardia Nacional para aplacar los disturbios, ordenó la retirada de los efectivos de ese cuerpo estatal que interviene en catástrofes naturales y situaciones de desorden público.
Las autoridades federales tienen en marcha una investigación independiente sobre el suceso, sobre el cual existen versiones contradictorias de la Policía y los testigos.
Para el profesor y activista Evans Smith «desde el primer día de la fundación de este país, la vida negra es considerada como una propiedad y lo que ha pasado en Ferguson es el resultado lógico de eso».
Afirmó Smith que el racismo es institucional, pues «toda institución estadounidense, ya sea escuela, policía o cárcel tiene un foco profundo de racismo contra los negros».
El docente dijo basar sus afirmaciones en las experiencias de sus estudiantes afroamericanos en una escuela secundaria de Ferguson los que siempre sienten temor de un encuentro con la Policía «porque puede desencadenar una tragedia».
La versión oficial de las autoridades alega que Brown ofreció resistencia y por eso Wilson utilizó la fuerza letal, sin embargo testigos presenciales plantean todo lo contrario.
Incluso, los resultados de una autopsia privada solicitada por la familia de la víctima reveló que por la entrada de los proyectiles que impactaron en uno de sus brazos estaría con las manos en alto.
Los testimoniantes afirman que el agente Wilson le disparó a Brown cuando estaba parado en posición de entrega sin ofrecer resistencia. Su está previsto para el próximo lunes.
Fuente: Prensa Latina