La pena de muerte ha existido prácticamente en todas las civilizaciones humanas. Desde la Antigua Grecia, donde se ejecutaba a los bárbaros (extranjeros) traidores de la polis. Pasando por la Edad Media, donde se perseguía y ejecutaba a cualquier persona por los motivos más irracionales y absurdos, y atravesando incluso el período de la Ilustración, durante la Revolución Francesa. Y es que la pena de muerte es la herencia más lamentable de la Antigüedad.
Escafismo.
El escafismo, también conocido como Scaphismus, es un método de ejecución que utilizaban los persas, tristemente célebres por ser brutales y sanguinarios. Se han registrado algunas variantes, pero básicamente consiste en inmovilizar a la víctima, causarle diarrea y vómitos, y untarle todo el cuerpo de una mezcla de miel y leche.
El objetivo es que las heces y el azúcar atraigan a los insectos para que la persona sufra picaduras y heridas graves que lo conduzcan a un shock séptico. El shock puede demorar semanas, por lo tanto la persona muere de deshidratación y hambre.
Matrimonio republicano.
Este método de ejecución es propio del «reinado del terror» de la Francia post Revolución. Lo inventó Jean-Baptiste Carrier, durante la última década del 1700. Consistía en atar de espaldas a dos personas de sexos opuestos, exponerlas durante una hora al escarnio público y luego arrojarlas al río para que mueran ahogadas.
Hoguera.
De los más difundidos y utilizados métodos de ejecución en Europa, está muy vinculado a la inquisición y a la caza de brujas. Había diferentes formas de disponer a la víctima al fuego, pero básicamente la idea era que sufra el impresionante dolor de las quemaduras, hasta que muera. La muerte se producía o bien porque el fuego alcanzaba su órganos vitales, o por falta de oxígeno y asfixia.
Tablón.
Caminar por el tablón hasta caer al mar, sin duda uno de los métodos más conocidos por todos nosotros gracias a películas y dibujos animados. Método utilizado fundamentalmente por piratas, pero también generalizado al resto de las embarcaciones europeas. El objetivo aquí no es la tortura, por lo tanto el hecho de caminar por el tablón es más bien simbólico, simplemente los arrojaban al mar para que mueran ahogados o atacados por tiburones.
Damnatio ad bestias.
¡A los leones! El más utilizado método de ejecución de la Antigua Roma. La lucha con bestias en una arena de combate tenía dos modalidades, era o bien voluntaria para probar valentía y recibir reconocimiento, o bien utilizada como escarnio público y pena de muerte.
Estirón vertical.
Ideado y difundido en Estados Unidos durante los siglos XIX y XX, el estirón vertical -Upright Jerker- es un procedimiento similar al ahorcamiento, pero invertido. En lugar de dejar caer al condenado por una trampilla del suelo, con éste método la persona es elevada y sacudida mediante un mecanismo de pesos y poleas. La muerte es relativamente rápida pero muy dolorosa.
Aplastamiento por elefante.
Técnica utilizada en Asia, principalmente en India, tenía por objetivo la muerte y el escarnio público. Consistía en arrojar al condenado frente a un elefante para que éste, sintiéndose amenazado, lo ataque brutalmente, produciéndole una muerte lenta, dolorosa y humillante.
La sierra.
Terriblemente sanguinario y doloroso, además de humillante y degradante. La técnica consiste en colgar boca abajo a la persona con las piernas abiertas y lentamente comenzar a cortarla por la mitad, hasta llegar a la cabeza. Por supuesto que la persona muere mucho antes, desangrada.
Desollamiento.
El desollamiento o despellejamiento consistía en remover cada centímetro de piel de la persona. Lenta, inimaginablemente dolorosa, sanguinaria e inhumana forma de ejecutar a un individuo. La muerte se produce principalmente por el desangre.
Águila de sangre.
Este método se menciona en la antigua literatura nórdica y si bien no hay evidencias concluyentes sobre su veracidad, existen tantos relatos y testimonios que es posible considerarlo parte de esta lista. El método consiste en abrir la piel de la espalda de la víctima, quebrarle sus costillas y extraer sus pulmones. Las costillas quebradas y los pulmones expuestos emulan la figura de un águila, de ahí el nombre de águila de sangre.
La rueda.
Brutal método utilizado durante la Edad Media, principalmente en Suecia, Holanda, Italia, Alemania y Francia. Era más un método de tortura que de ejecución. Consistía en quebrar todos los huesos de las extremidades de la persona, evitando herirlo de muerte. Luego de quebrar todos sus huesos y dislocar todas sus articulaciones, el condenado era atado sobre una rueda, a la cual se hacía girar para finalmente provocar la muerte.
Fuente:
Ojocurioso