Gabriel Boric, único voto en contra del proyecto que regula condiciones de empleados de casa particular

El proyecto de ley para la mejora de las condiciones de los y las trabajadoras de casa particular fue aprobado este martes por la Cámara de Diputados por 106 votos a favor y 1 en contra, el del diputado Gabriel Boric, quien consideró que el proyecto “es insuficiente e incluso discriminatorio con las trabajadoras.”

Entre las mejoras que implementará esta ley en las condiciones laborales de las mal llamadas ‘nanas’, se encuentra la reducción de la jornada de trabajo de 72 a 45 horas semanales, que solo regula la condición de las trabajadoras externas.

La labor de las trabajadoras «puertas adentro» seguirá sin estar sujeta a un horario y por tanto a merced de la decisión que respecto a ello tomen sus empleadores; en este hecho justificó, entre otros, el diputado su voto en contra en la nota que publicó en su blog poco antes de que tuviera lugar la votación:

«Así, en el mundo ideal, si a estas trabajadoras se les respeta el descanso dominical más un día de descanso a la semana y trabajan como es usual 12 horas mínimo, tendrán una jornada de 60 horas a la semana, lo que supera con creces a la jornada del resto de los trabajadores. Si sumado a esto tenemos una fiscalización casi de papel, podríamos decir que en Chile cerca de 55.600 personas, dentro de cuyo segmento el 98.2% equivale a mujeres, están en un régimen prácticamente de esclavitud al no establecer un límite a la jornada de trabajo. No olvidemos que la lucha por las ocho horas de trabajo es una lucha que dieron los trabajadores en el siglo XIX y hoy estamos amparando que existan mujeres trabajando más de doce horas diarias.»

Además, Boric hizo alusión al más que posible caso de que en la práctica la jornada estipulada de 45 horas para trabajadoras externas no sea una realidad:
“Se reduce a 45 horas a la semana, pero luego se agrega una jornada adicional, sui generis en el derecho comparado (no se aplican las reglas que el Código del Trabajo estipula para la jornada extraordinaria) , de 15 horas más, que se supone se establece de común acuerdo y bien sabemos quién gana en los acuerdos entre los empleadores y los trabajadores”

Una fiscalización “timorata”

La iniciativa aprobada establece que el contrato debe incluir la tarea a realizar y el lugar donde se vaya a desarrollar, así como la asistencia – si es que así fuera- a “personas que requieran cuidados especiales” .

En este punto, el diputado ha señalado, refiriéndose a la recomendación a Chile del Comité de las Naciones Unidas para la eliminación de la discriminación de la mujer (CEDAW), la importancia de que en este proceso los cambios legislativos vayan acompañados de una fiscalización eficiente, algo que no cumplirá el proyecto aprobado:
“La fiscalización aquí propuesta es bastante timorata toda vez que se supone existiría un choque con el derecho a la intimidad y vida privada del empleador, y por lo tanto, si este no quiere que lo fiscalicen tendría la posibilidad de negarse y concurrir en otra oportunidad a la Inspección con los documentos requeridos.”

“Deberíamos adoptar medidas especiales para protegerlas”

El diputado apunta a la precarización del trabajador de casa particular, y señala que precisamente por la vulnerabilidad a la discriminación del grupo sobre el que se legisla debieran de hecho aumentar los esfuerzos para proteger sus derechos.

Por último, el diputado destacó el trabajo del Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular (Sintracap) y les ofreció su apoyo para mejorar el proyecto.

“Mi voto es contrario a este proyecto por su insuficiencia y su inexplicable legitimación de la desigualdad de trato hacia las trabajadoras de casa particular en relación al resto de los trabajadores”

Ruth Olate, dirigenta de Sintracap: «Tenemos que ser las mayores fiscalizadoras»

Ruth Olate, presidenta del Sincatrap, valoró positivamente la aprobación y destacó el duro trabajo llevado a cabo hasta haber conseguido ver la iniciativa aprobada.

No obstante, apuntó : “tenemos mucho miedo de que se vaya a incurrir en malas prácticas, en abusos. Esperamos que los empleadores cumplan la nueva ley y también nosotras las trabajadores tenemos que ser las mayores fiscalizadoras”.

Diputado Jiménez: “Es un día histórico”

El diputado PPD, Tucapel Jiménez, autor de la medida del proyecto que establece la prohibición del uso de uniforme en lugares públicos, señaló que se trató de un “día histórico en relación a los derechos de los trabajadores. Lo que estamos haciendo es asimilar las condiciones laborales de las trabajadoras de casa particular al resto de los trabajadores en Chile (…)aunque «todavía quedan algunas cosas pendientes como la negociación colectiva, y el seguro de desempleo”.

La importancia de una buena campaña comunicacional

El diputado Lagos Weber celebró el avance en esta materia “rezagadas de la legislación laboral” y señaló que “lo que cabe ahora, junto con que se cumpla la ley, es que se realice una campaña comunicacional para informar de los derechos. Muchas de las personas que trabajan en distintas casas y hogares en Chile, no conocen esta legislación.

¿Qué más cambiará con el nuevo proyecto?

Además de la reducción de jornada para las trabajadoras “puertas afuera”, la prohibición del uso de uniforme en lugares públicos y las puntualizaciones en el contenido de los contratos, estos han sido los avances principales que establece la ley:

Prohibición de imputar el alojamiento y la habitación dentro de la remuneración.

Prohibición de reducir la remuneración y no se consideran imputaciones.

Derecho a descanso diario: Un descanso mínimo absoluto de 12 horas diarias en dos fracciones: de 9 horas ininterrumpidas y de 3 horas fraccionables durante la jornada (trabajadoras puertas adentro).

Derecho a descanso todos los días domingos del mes. (Trabajadoras puertas adentro).

Derecho a descanso todos los días sábados del mes (este día se puede acumular, fraccionar o intercambiar por otro día, dentro del respectivo mes, previo acuerdo de las partes y no se puede compensar en dinero). (Trabajadoras puertas adentro).