El artista y la protesta

El ser humano a lo largo de su historia ha tratado de exponer, explicar, crear, manifestar y mil verbos más, lo conocido como arte. No obstante, aún sigue siendo un concepto con definición indefinible, ya que es explotado a partir de las necesidades creativas del ser.  Por lo tanto, el arte es un medio abierto a la interpretación del creador y del observador.

Sleepwalker, Taiwan. 

 La interpretación a la que está sujeta el arte está comprendida por símbolos inferidos e impuestos que se materializan a través de palabras e imágenes, esto hace posible la existencia del arte como protesta, puesto que la idea se compone de imágenes y palabras que le dan fuerza, y por consiguiente poder.  El arte como protesta se debe construir a partir de símbolos valorativos de una idea que logre relacionarse con las crisis socio-políticas de la sociedad, que se encuentre en un determinado espacio y tiempo.

Kacey Wong, es un artista que trabaja actualmente para las protestas en pro de la democracia que se están llevando a cabo en Hong Kong, las cuales son dirigidas por estudiantes y miembros del Occupy Central. El diseño gráfico de algunas de estas imágenes que representan a este grupo de oposición han sido creaciones de Kacey Wong, las cuales tienen símbolos valorativos consolidados durante la protesta, como es el uso constante de las sombrillas como un medio de defensa y los listones amarillos que representan una forma de no-violencia en contra del gobierno chino.

Cabe mencionar que Kacey Wong se ha destacado por sus esculturas urbanas e incluso performance con las que busca transmitir la dimensión evolutiva que ha tenido Hong Kong desde 1997 y que ésta no debe detenerse a razón de la imposición del gobierno chino, el cual quiere hacer presente su influencia política en las elecciones de 2017.

House of Red House of Blue

Attack of the Red Giant Thomas Leung

 Uno de los proyectos artísticos más relevantes del artista en cuanto a técnica e idea de protesta es House of Red House of Blue, la cual es una escultura urbana vivencial que representa, en primera dimensión, una librería que en su interior amorfo contiene “dangerous books”, así él hace referencia a libros que predican ideas políticas rechazadas por el gobierno chino. Este proyecto se caracteriza por un manejo estratégico de materiales que juegan un papel simbólico para transmitir al observador las inconformidades políticas de la sociedad, como es el uso de la madera quemada, que representa al fuego como un elemento que puede destruir, pero a su vez transformar. El olor de la madera quemada, que se convierte en un hedor insoportable, se junta con el peso intelectual que ofrece la presencia de los libros de oposición.

El objetivo de la mayoría de los proyectos artísticos de protesta de Kacey Wong es recordar el catastrófico pasado de Hong Kong y advertir sobre los sucesos futuros, que pueden acabar con las pocas pero relevantes victorias con lo que ya cuenta la sociedad hongkonesa.