Como consecuencia de la discrepancia que existía en torno a esta reforma respecto del espacio más público de todos, la Alcaldesa Carolina Tohá finalmente decidió no dar curso a esta determinación y anunció que este ítem sería retirado de la ordenanza municipal.
“Si yo hubiese sabido lo defendería, pero no estoy de acuerdo y no me parece. Esa norma no va a estar en la ordenanza, vamos a retirar esa norma de la ordenanza”, dijo la autoridad comunal, según informó La Tercera.
Según lo expuesto por la alcaldeza Tohá, ella no estaba en conocimiento del ítem que prohibía actos de medicidad en la plaza, y dijo que en dicha ordenanza “se trabajó en un equipo en el cual yo participé en varias reuniones, pero hay otras normas que se incluyeron que simplemente son réplicas de ordenanzas antiguas que no se trabajaron en esta mesa”.
Según el diario, la polémica se generó luego que la Dirección Jurídica entregó una propuesta de ordenanza para el uso de la Plaza de Armas, el cual se debatiría durante el concejo municipal. Entre los puntos que contiene el documento se definen los límites que se regularán, además menciona la creación del “administrador de la plaza.”
Entre las propuestas, existen nueve restricciones que fueron establecidas, siendo el artículo N° 18 el que hace referencia a la prohibición de toda acción de mendicidad.
Luego de que se diera a conocer esta prohibición, los concejales de la comuna manifestaron diversas reacciones de desaprobación ya que manifestaron que no era la idea el convertir a la Plaza de armas en un espacio exclusivo de élites.
El concejal PPD por Santiago, Alfredo Morgado, le dio crédito a la alcaldesa cuando dijo que no conocía la prohibición de los actos de mendicidad ,”yo le creo y desde esa perspectiva me parece extraordinario que ella haya dicho inmediatamente que no estaba de acuerdo en aquello”.
Por su parte, Esperanza Alcaíno, quien también es concejala por Santiago, afirmó que quien puso la norma fue la Dirección Jurídica: “fue un error. Lo obvio es que se elimine, porque no tiene pies ni cabeza.”
Sin embargo, Felipe Alessandri, de Renovación Nacional, no perdió la oportunidad para fustigar a Tohá y sacar aprovechamiento político de esta disposición, señalando: “que venir ahora a decir que ella no conocía el tenor de la norma, o está faltando a la verdad o la descoordinación dentro del municipio es garrafal. Yo me inclino por la segunda opción”.
En cualquier caso, afortunadamente esta arbitraria e injustificada disposición municipal no será puesta en ejercicio y la Plaza de Armas seguirá siendo de libre acceso para todos.
Los trabajos de remodelación de la Plaza de Armas comenzaron en enero de este año y deben estar finalizados para el mes de diciembre.