Los vehículos expulsan dióxido de carbono a través de los tubos de escape por la quema del combustible. Estas emisiones deterioran el medio ambiente y los efectos son cada vez más claros. Científicos de todo el mundo se dedican a buscar una solución a este problema y una de las conclusiones a las que han llegado es que se debe reducir la cantidad de tiempo, combustible y gases tóxicos enviados a la atmósfera al ir a trabajar.
Según un estudio de Climate Group, llevado a cabo por la consultora McKinsey, la utilización de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación para trabajar desde casa podrían disminuir un 15% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono. Esto quiere decir que poniendo atención y utilizando las TIC al máximo (teletrabajando, por ejemplo) se podrían ahorrar casi 8 gigatoneladas de emisiones de dióxido de carbono antes del año 2020.
La buena noticia es que las empresas están tomando conciencia de esto e incentivan cada vez más a sus empleados para que trabajen desde casa. Los números son muy positivos. En España, casi un 22% de las empresas tienen personal que trabaja fuera de la oficina a través de internet. En 2013 el porcentaje era de 21,6% y en 2009 de 16%. Esto quiere decir que la cantidad de teletrabajadores en España creció casi 6 puntos en 5 años.
En Gran Bretaña, una de cada siete personas trabaja desde casa por internet, esto quiere decir que hay más de cuatro millones de personas que tienen la oficina en casa. ¡Cuatro millones de británicos que contribuyen al cuidado del medio ambiente!
En los Estados Unidos, el 37% de los empleadores permiten que sus funcionarios trabajen desde sus casas, y el 7% del total de los trabajadores estadounidenses trabaja desde la comodidad de
Los vehículos expulsan dióxido de carbono a través de los tubos de escape por la quema del combustible. Estas emisiones deterioran el medio ambiente y los efectos son cada vez más claros. Científicos de todo el mundo se dedican a buscar una solución a este problema y una de las conclusiones a las que han llegado es que se debe reducir la cantidad de tiempo, combustible y gases tóxicos enviados a la atmósfera al ir a trabajar.
Según un estudio de Climate Group, llevado a cabo por la consultora McKinsey, la utilización de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación para trabajar desde casa podrían disminuir un 15% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono. Esto quiere decir que poniendo atención y utilizando las TIC al máximo (teletrabajando, por ejemplo) se podrían ahorrar casi 8 gigatoneladas de emisiones de dióxido de carbono antes del año 2020.
La buena noticia es que las empresas están tomando conciencia de esto e incentivan cada vez más a sus empleados para que trabajen desde casa. Los números son muy positivos. En España, casi un 22% de las empresas tienen personal que trabaja fuera de la oficina a través de internet. En 2013 el porcentaje era de 21,6% y en 2009 de 16%. Esto quiere decir que la cantidad de teletrabajadores en España creció casi 6 puntos en 5 años.
En Gran Bretaña, una de cada siete personas trabaja desde casa por internet, esto quiere decir que hay más de cuatro millones de personas que tienen la oficina en casa. ¡Cuatro millones de británicos que contribuyen al cuidado del medio ambiente!
En los Estados Unidos, el 37% de los empleadores permiten que sus funcionarios trabajen desde sus casas, y el 7% del total de los trabajadores estadounidenses trabaja desde la comodidad de