Es posible que una de las cualidades que vuelven polémico al tatuaje sea su permanencia, al menos en nuestra cultura, tan entregada al culto de la imagen que, por definición, es volátil, efímera, siempre cambiante. Más allá de sus asociaciones con los estratos bajos de la sociedad (criminales, pandilleros, prostitutas, etc.), a muchos el tatuaje los escandaliza porque es algo para toda la vida, una marca en nuestro cuerpo puesta voluntariamente para jamás borrarse. Y de verdad es jamás: de acuerdo con el video que ahora presentamos, el tatuaje más antiguo conocido pertenece a una momia peruana con 6 mil años de antigüedad. Cuando fue descubierta, todavía podían observarse rastros del tatuaje en los restos sobrevivientes de su piel.
Pero en esta ocasión nos ocuparemos de los tatuajes no culturalmente, sino científicamente: ¿qué los hace permanentes? Para sorpresa de muchos, el hecho de que el cuerpo pasa combatiéndolos toda su vida.
No es exagerado afirmar que para el cuerpo la tinta de los tatuajes es un elemento extraño, uno que además se introduce por medio de una herida y que por tal razón suscita una reacción de cura por parte de nuestro sistema inmune. Un proceso fascinante que es explicado con notable claridad en el video que ahora compartimos.
Por cierto, te recordamos que si los subtítulos no aparecen automáticamente, puedes activarlos con el botón CC que se encuentra en la esquina inferior derecha del reproductor.
¿Una razón más para tatuarse? ¿Mantener siempre activas las defensas de nuestro cuerpo?