Jacqueline Pinochet: que sigan enjuiciando militares es espantoso

“No sé si es la señora Bachelet o su entorno los que se encargan de mantener viva esta odiosidad hacia nosotros, pero fue en su anterior mandato cuando se armó una historia para meternos presos con mis hermanos y con mi madre (2007), acusándonos de malversación de fondos fiscales”

Esta es una de las frasesitas que se mandó la hija más “loquilla” de Pinochet, quien culpa a la Presidenta de mantener viva a odiosidad hacia la familia del dictador. Es que esta mujer se olvidó de los abusos cometidos en dictadura y no entiende que la odiosidad del país hacia la figura de su padre no necesita de ninguna autoridad para fomentarla. Es más, sistemáticamente los gobiernos de la DC se encargaron de echarle tierra al tema y no hicieron todo lo necesario para que exista justicia, dejando que pase el tiempo y fomentando la idea estúpida del “perdón y olvido”. Ella misma lo reconoce diciendo:  “Con la DC era distinto, porque tienden a respetar al que piensa diferente”. Y con esto nos aclara bastante el panorama respecto del rol que jugó la Democracia Cristiana en el período reciente de post dictadura.

Pasando a otro tema, Jaqueline se sorprende de que en las conmemoraciones de los 40 años del Golpe de Estado, la televisión se hiciera cargo de repasar imágenes inéditas y que diera a conocer material que estaba oculto de esos años como una forma de saldar una deuda histórica. Frente al tema dijo lo siguiente:  “Los programas sobre los 40 años fueron aberrantes… la televisión en Chile es lo peor.”

En la entrevista, aprovecha la oportunidad de victimizar a su familia acusando un acoso injustificado de los medios y ejemplifica: “con decirte que el otro día llegó un canal de TV hasta la casa de mi madre para grabar a uno de los perros que ladraba, acusándonos de abandono, ¿dime si no es psicótico? Es agotador, ¡¿hasta cuándo?!, ¡déjennos vivir en paz!”.

Además, culpa al gobierno socialista de Bachelet de generar contenidos para sensibilizar a la gente a través de los medios (que históricamente han servido a nadie más que al poder del que fue parte su padre. Conocidísima es la Historia sobre el rol de Agustín Edwards y El Mercurio en la dictadura) cuando está enfrentando crisis políticas. Respecto de este tema señaló lo siguiente: “Hay un grupo de socialistas que mantiene el tema porque viven de esto; si se acaba, se quedan sin trabajo. Han tratado de destruir la imagen de Pinochet por todos lados.”

También aprovecha la ocasión para cobrarle sentimientos a la gente de su sector respecto de la forma en que han renegado de su papá: Y por supuesto la gente de derecha ‘si te he visto, no me acuerdo’; se desentienden. No los critico, los comprendo…

Lo más notable de la entrevista, es que, para seguir jodiendo a la Presidenta Bachelet (y eso que estaba hablando de odiosidades injustificadas), cuando la periodista le pregunta:

Para la Presidenta la violación a los DD.HH. es un tema sensible; su padre murió a causa de las torturas que sufrió en el gobierno militar.

Responde: Gente de la Fuerza Aérea que conoció al general Bachelet cuenta que a él le habría dado un infarto luego de jugar a la pelota. Eso estaría en un informe escrito en el hospital de la Fach; a mí no me consta.

Luego prosigue la entrevista con un frase que da un poco de miedo: “En algún minuto reconocerán la obra de mi padre. Quizá no estaré viva para verlo. Ojalá que en esa transición llegue una persona que no engendre odio, porque cuando lo inyectas en una sociedad, la gente termina polarizada, enrabiada y después anda tirando el auto encima o rompiendo todo en las protestas, como ocurre ahora.

Luego la periodista insiste en el tema de DDHH señalando que con familiares desaparecidos es difícil dar vuelta la página, a lo que responde que: Tendrá que ocurrir si queremos surgir como país. Con Bachelet será difícil, nunca la he visto conciliadora. En esta vuelta la noto distinta, absolutamente izquierdizada. Y a la gente más estresada, en un país cada vez más caro y con menos plata en los bolsillos.

Respecto de la labor de la justícia señala: No creo mucho; fui perseguida y encarcelada sin cometer delito. Hay presiones, si no, actuarían distinto; ninguno quiere meterse. Y que sigan enjuiciando militares es espantoso. Por último, que hagan un plebiscito y les pregunten a los chilenos si quieren que sigan metiendo preso a cuanto militar existe, a viejos muriéndose. No digo que eran santos, pero los del otro lado, tampoco. Se desconoció la Ley de Amnistía… Lo único que nadie ha podido desconocer es que mi papá dejó Chile a otro nivel, que le cambió el pelo, y eso a muchos les duele, ¡les hierve la sangre! Por eso muerto, siguen destruyéndolo, a pesar de que entregó el gobierno en las mejores condiciones, porque si él no hubiera querido, no lo entrega. Si en 17 años hizo lo que quiso en el país —como dicen—, ¡pucha que lo dejó bien parado! Otro en su lugar habría tenido miles de millones de dólares afuera, y no hubiera juntado una ‘cagadita’ de plata que más encima su ex administrador se echó una parte al bolsillo.

Personalmente estoy segura de que si se realizara un plebiscito en donde se le preguntara a la ciudadanía sobre si quieren que se siga enjuiciando militares, la respuesta sería un SI rotundo. Es lo único que le falta a Chile para dar una señal clara y potente en favor de los Derechos Humanos, sin embargo Jacqueline plantea la idea de que, porque están viejitos, la ciudadanía va a desconocer las aberraciones que cometieron. Es raro.

Respecto de la frase sobre si Pinochet no hubiese querido, no entrega el país, es alarmante. Los ojos del mundo estaban puestos sobre el país y no le quedó otra que entregarlo. Sin embargo lo plantea como si el país realmente hubiera sido de propiedad del dictador; como si hubiese hecho una generosa donación al realizar el plebiscito.

Quizás, la única cosa valorable que señala en toda la entrevista es que En vez de mirar tanto hacia atrás, por qué mejor no se preocupan de mejorar la salud, de fiscalizar las isapres, por ejemplo, que son un robo. La periodista le señala que fue un modelo instaurado por su padre a lo que responde que se tergiversa la idea con los años, porque la idea original, era buena.

Es extraño ver que una persona hable de odiosidades injustificadas, que en esta época señale que Bachelet es culpable de todo y que diga que el General Bachelet se murió por jugar a la pelota. Le faltó decir que los detenidos desaparecidos están en Argentina porque no vivían felices con sus mujeres. A veces uno se pregunta ¿En qué planeta viven estos personajes de ultra derecha? o ¿La que se equivocó fui yo?