Un hombre de 20 años fue detenido ayer en la tarde en su residencia en un suburbio de Sydney, mientras que un hombre de 21 años, fue arrestado en otro suburbio al noreste de la ciudad, según la policía australiana. Ambos están programados para comparecer ante la corte de Parramatta el día de hoy.
Los jóvenes fueron detenidos como parte de las investigaciones sobre la presunta planificación de un ataque terrorista en Australia, y también por facilitar viajes de ciudadanos australianos a Siria con fines de entrar en combate armado.
Se apelará ante el tribunal que Sulayman Khalid, el joven de 20 años de edad, se encontraba en posesión de documentos relacionados a preparaciones para facilitar, asistir o ayudar a una persona para llevar a cabo un acto terrorista.
El otro sospechoso fue acusado de violar una orden de control.
Khalid apareció en la televisión australiana a principios de este año vestido en una chaqueta estampada con la bandera del Estado Islámico (EI) y abruptamente salió del estudio cuando se le preguntó acerca de su apoyo a los combatientes del EI y el hecho de que su pasaporte había sido revocado debido a los temores que se dirigiera al extranjero para luchar, según el diario australiano The Daily Telegraph.
“Esta operación es un ejemplo de todas las agencias, reconociendo lo importante que es actuar en una etapa temprana para evitar que los miembros inocentes de la comunidad esten sujetos a daño», señaló el Comisionado Adjunto Michael Phelan. “Instamos a los miembros del público a permanecer vigilantes y que presenten cualquier tipo de información que tengan – su información puede ser vital para asegurar que la policía pueda mantener a nuestra comunidad segura.”
Si la corte declara culpable a Sulayman Khalid, el joven puede enfrentar una pena de 15 años, mientras que para el hombre de 21 años, el castigo podría ser de 2 años.
“Dijimos en septiembre que el trabajo de la Operación Appleby será continua. Los cargos de hoy reflejan el trabajo en equipo en conjunto con policías dedicados a la protección de la comunidad,” expresó Catherine Burn, la comisionada de Operaciones Especiales de la policía australiana.
La operación antiterrorista australiana se intensificó tras el secuestro en un café en el centro de Sydney donde un hombre mantuvo encerradas a 17 personas por cerca de 16 horas. Dos de las personas secuestradas fallecieron. El delincuente fue identificado como Sheik Man Haron Monis, un refugiado de origen iraní y clérigo musulmán radical. Anteriormente, Sheik Man Haron Monis ya era conocido por la policía puesto que había estado involucrado en una campaña contra familias de soldados australianos que sirvieron en la guerra en Afganistán.
Desde septiembre la policía australiana ha detenido a 11 personas en relación a la lucha contra el terrorismo.
Sandra Segall
El Ciudadano