Duda Moral

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Primero se llevaron a los negros, pero a mi no me importó porque yo no lo era. Enseguida se llevaron a los judíos, pero a mí no me importó, porque yo tampoco lo era. Después detuvieron a los sacerdotes, pero como yo no soy religioso, tampoco me importó. Luego apresaron a unos comunistas, pero como yo no soy comunista, tampoco me importó.
…Ahora me llevan a mí, pero ya es tarde.»
Bertolt Brecht

Cuando era más joven, alrededor de los 23 años, por amor y convicción me metí en la organización «Liberación Animal» incluso deje de comer carne y una vez me llevaron detenida por manifestarme contra el rodeo en un evento sobre la «chilenidad». En esa época, sentía que era la única cosa que valía la pena: ayudar a los animales a librarse del abuso del hombre. Con el tiempo, leyendo artículos sobre la causa, llegue a una pagina, llamada «Animalweb» esta pagina, aparte de mostrar denuncias que tenían que ver con la causa animalista, también tenia artículos (en esos años) sobre el nuevo orden mundial, un tema del que se habla mucho incluso hoy en día, a pesar del tiempo que ha pasado.

En ese tiempo también conocí la Anarquía. Apenas averigüé un poco me sentí completamente conquistada por esta forma de pensar, para mi fue lo mas cercano a la perfección: construir, todos juntos, una sociedad justa, donde cada cual hacia su parte y recibía lo necesario para vivir, no había religiones estúpidas que fanatizaban a las personas, la organización era horizontal, todos éramos iguales. Era perfecto. Yo desde chica veía como a mí alrededor, había pobreza, desamparo, abuso y discriminación. Siempre considere que la gente trabajaba demasiado y la riqueza estaba mal distribuida. Ahora me enteraba de que había una forma donde todos podíamos ser felices y vivir en paz, lo único que quería era que despertáramos de este letargo y lucháramos por nuestra Libertad y estaba dispuesta incluso a extremos como morir o dejarme torturar por la causa. Alegaba todo lo que podía en foros, mandaba links y videos, hablaba del tema con amigos, me volvía loca tratando de convencer a UNA persona a veces. Pero poco a poco fue muriendo mi entusiasmo. A parte de que me fui a vivir sola y tuve que trabajar muchas mas horas, lo que hacia que llegara extenuada a mi casa, el mismo cansancio me hizo ver que quizás no valía la pena. El mismo cansancio y LA GENTE

La sociedad: grupo enorme que vive la paradoja de querer SER FELICES, se quejan de pobreza o miseria, pero no les interesa crecer como personas, ni en lo espiritual ni en lo cultural. Se sienten tranquilos con tener «valores» (códigos de comportamiento que encajan en el consenso) y sería todo. No quieren creer que podrían hacer y tenerlo todo. No les interesa. Viven dormidos, sumidos en sus vidas, donde todo lo que importa es ellos, y a lo más, su grupo familiar, trabajar, comer, dormir, follar, criar hijos y morirse. Inconscientes, prejuiciosos y crueles, le temen al cambio y no aceptan a las personas diferentes o extrañas. Y lo peor: en esas épocas yo (y muchos lo eramos) era extraña por naturaleza: un poco huraña, nerviosa al querer expresarme, me vestía raro, usaba el pelo corto y de color, bototos, zapatillas, cinturones conm puntas, mochilas de milico, etc. y lo combinaba de la manera que se me antojaba. Por esto, me miraban feo en la calle, me ignoraban en las instituciones publicas (como la inspección del trabajo, mi antiguo liceo, carabineros, juzgados etc.), viví el abuso de poder, discriminación y desprecio incluso entre los seres de mi grupo familiar.

Todo exploto un día en que un chofer de la micro no me quiso parar donde correspondía, no se por que, me dejo como 2 paraderos mas lejos, cuando fui a reclamarle me miro con desprecio y simplemente no me contesto. Al caminar hacia mi destino pensé en por que la gente era así conmigo: no era una delincuente, era una persona, tenia buenas intenciones, quería que el mundo fuera un mejor lugar para vivir, quería que hubiera igualdad, que a nadie lo discriminaran ni despreciaran y así y todo no era bien recibida entre la comunidad, ni siquiera en mi familia. En ese momento me di cuenta que estaba cansada de gritar en desiertos. Me canse de la gente y los mandé al demonio, nunca mas pelearía por mejorarle el mundo a ellos, no se lo merecían.

Un par de años después conocí a mis amigos, mi nueva familia. Conocí la magia y lo que era Dios, mas mi resentimiento con las personas lamentablemente no ha desaparecido. Así y todo me anime a de nuevo intentar concientizar a las personas, hacerlas reaccionar, esta vez en pos de una revolución metafísica, donde la anarquía y la magia estallaran en las caras de todos y con especial violencia en la cara de la elite que es la culpable de casi todos los males de la humanidad. Me he unido a causas que combaten abusos que quiero parar a toda costa y por todos los medios (dentro de lo que me permiten los horarios y lo que es hacer mi propia vida), probándome a la vez a mí misma. Como impedir que se construya una estatua de 13 metros del papa Juan Pablo II, sobre una plaza que lleva el nombre de un anarquista y poeta que fue torturado y encarcelado por querer un mundo mejor. También quisiera que se cambiara la constitución que fue impuesta en la dictadura, que la gente se uniera para rechazar el flúor que nos ponen en el agua, los chips en los carnet de identidad, las tarjetas de control que registran incluso el ADN de los niños chicos, usando de bandera de guerra, una pobre niña que fue raptada y violada, que no haya vacunación obligatoria a las personas para «prevenir» la influenza humana, o que luchen por los derechos sexuales de las mujeres, y las personas en general. Pero a veces me baja el desconsuelo. Veo que no hemos cambiado nada como personas, hay MÁS elitismo, MÁS prejuicios, MÁS abuso. Y a la gente ¡LE DA LO MISMO! Aman a las instituciones religiosas, aman a las instituciones gubernamentales, aman a todo tipo de iconos politicos y religiosos, aman que los gobiernen, que les impongan y que les prohíban, aman ver más y más carabineros llenando las calles, en vez de prevenir las causas de la manoseada «delincuencia». Despues de elegir gobernantes (por los motivos más antojadizos) se olvidan de vigilar su trabajo y no permitir que abusen de ellos, no les interesa que abusen o dejen de abusar. No les interesa nada, solo «tener cosas» y apartar de su mundillo a los mas desposeídos o a los desadaptados de su consenso. Si no eres de la masa, no mereces nada. Con mucho dolor veo como sufren quienes tienen AUN ME JORES sentimientos que los míos por la humanidad, veo a mis seres queridos sin trabajo, sin oportunidades, pobres, despreciados por sus familias, por la sociedad y solo Dios sabe que ellos si que quieren que todos seamos felices, iguales, mejores y a nadie le importa un comino nada. Con cansancio a veces veo aparecer más y más abusos como si fueran hongos después de la lluvia y siento que unos pocos, nos llevamos el peso de la inercia de TODOS.

Al buscar consuelo en otros hombros, muchas veces me he encontrado con indiferencia y desinterés bueno es que a mi no me afecta mucho, así que no importa. Es en esos momentos, como ayer, mientras leía que mas de alguien escribía «PARANOICOS «PREOCUPENSE DE SER FELICES MEJOR» y etc. en un articulo sobre la «Marcha Anti Nuevo Orden Mundial» deseé con toda mi alma, que todo lo que hablan incluso en la Biblia, y lo que pronostican muchos para el 2012 se haga realidad: que quede la hecatombe que dicen. Que se abra el cielo, la tierra, el mar y que como tanto se llenan la boca con escritos hebreos «se separe la paja del grano» y se acaben todos los que se han aburrido de abusar de los mas débiles, que se acaben los indiferentes desinteresados por crecer, que se derriben las barreras ideológicas, las religiones estúpidas, las creencias cerradas y todo lo que nos limita. Por que estamos podridos como especie. Se nos regalo la magia, el libre albedrío y nunca hemos sabido usarlo para algo bueno.

Y ojala Dios se apiade de los que lo han sabido ver (y los inocentes), y se lleve a todos los que no lo ven ni lo respetan. Puede sonar beato, pero de verdad ojalá que sae acabara todo y viniera alguien a salvar a los que valieran la pena, así podría sentir un poco de esperanza, y podría dejar de pensar que estamos tan condenados yendo directo a un abismo horrible digno de la mejor trama de libro de Orwell.

ST.MEM.WP!