Los ambientalistas de ZCTF (Zimbabwe Conservation Task Force) informan que varias docenas de crías de elefante fueron capturadas en el parque nacional de Hwange, al oeste de Zimbabue. Separados de su manada, el fin es venderlos a otros países como China y los Emiratos Árabes Unidos que estarían interesados en exhibir los pequeños elefantes en zoológicos y circos.
El gobierno de Zimbabue argumenta que es legal el comercio con animales silvestres vivos y que existen garantías para el bienestar de los animales ya que se respetan los acuerdos internacionales. Uno de esos acuerdos firmado por Zimbabue es la Convención de Washington sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres(CITES por sus siglas en inglés) que establece que “durante cualquier período de tránsito, permanencia o despacho, sea cuidado adecuadamente, con el fin de reducir al mínimo el riesgo de heridas, deterioro en su salud o maltrato”.
Como estado contratante, Zimbabue cumple con ese acuerdo- al menos en el papel. Pero la realidad es otra: la captura de las crías elefantes, la separación de su rebaño y los largos trayectos causan un enorme estrés a los animales y pueden resultar en traumas graves. Una vez en los zoológicos y circos sufren una vida enjaulada y monótona y posibles maltrato o explotación. Con frecuencia, los elefantes mueren después de poco tiempo. De cuatro crías exportados a China en 2012, sólo una sigue con vida.
Exhortamos por ello al gobierno de Zimbabue que cambie este triste destino y deje a los elefantes en el parque nacional de Hwange. El gobierno debe colaborar con asociaciones ambientalistas para asegurar que las crías permanezcan en el país y que se les cuide hasta poder reintegrarlos en manadas. Por favor, firmen la petición para detener el tráfico de elefantes.
via Salva la Selva