En 1991, Hollywood no estaba acostumbrado a que una historia protagonizada por dos mujeres que huyen de la violencia masculina se convirtiese en un éxito de taquilla. Y, 25 años más tarde del estreno de ‘Thelma & Louise’, siguen sin tener demasiada relevancia las películas en las que los personajes femeninos son absolutos protagonistas y toman las riendas de sus vidas sin ayuda de un hombre. Al menos no con tanta crítica implícita al patriarcado.
De ahí lo significativo del aniversario de este clásico, escrito por Callie Khouri (que actualmente triunfa con la serie ‘Nashville’) y dirigido por Ridley Scott, que en ‘Alien’ ya había apostado por un personaje femenino fuerte: la agente Ripley.
‘Thelma & Louise’ es una road-movie en la que dos amigas hacen una escapada, en principio para pasar unas vacaciones, y romper así con una vida de pareja que no acaba de funcionar (Louise, interpretada por Susan Sarandon) y un marido maltratador (Thelma, el personaje de Geena Davis).
En el camino, confesiones, descubrimientos, acoso sexual y un intento de violación a Thelma que acaba en homicidio. Ya proscritas, seguras de que nadie entenderá el suceso como defensa propia, ambas huyen hacia Mexico y experimentan la libertad sin límites.
Hay mucha poesía en toda la película, incluido su épico final cuando ambas deciden, de la mano, lanzarse a un abismo. Quizás demasiado romántico pero valiente e impactante. O el sentimiento de que cuanto más las persiguen, más libres se sienten porque se tienen la una a la otra. Incluso hay un hombre ‘buenoide’ (Harvey Keitel), alguien que parece comprenderlas y promete respaldarlas con un tono entre manipulador y paternalista.
Porque ‘Thelma & Louise’ es sobre todo una historia de sororidad y micromachismos. Gracias a las interpretaciones de Susan Sarandon y Geena Davis (ambas feministas y con importantes proyectos sobre derechos de las mujeres) la complicidad entre las protagonistas es total.
En 1991, la película obtuvo el Oscar al Mejor Guión Original, pero fue Jodie Foster (por ‘El silencio de los corderos’) la que se impuso como Mejor Actriz a Davis y Sarandon así como a otras dos grandes intérpretes: Bette Midler y Laura Dern.
El papel de Louise supuso un antes y un después para Susan Sarandon y obtuvo el premio cuatro años más tarde por ‘Dead man walking’. Siempre ha estado implicada en política y defensa de los derechos humanos y es una activista pro-elección. Por su parte, Geena Davis, además de interpretar a heroínas de acción como las de ‘Ellas dan el golpe’ o ‘La isla de las cabezas cortadas’ dio vida a la primera presidenta de los Estados Unidos en la serie ‘Commander in Chief’ (‘Sra. Presidenta’) y actualmente está volcada en su fundación Geena Davis Institute on Gender in Media, que analiza el sexismo en Hollywoody la falta de representación de la mujer en la sociedad.
Para ambas, más allá de sus personajes emblemáticos, el viaje feminista sigue sumando millas y nuevas experiencias.
por Montserrat Barba Pan /feminismo.about