Su trabajo se describe en un artículo publicado esta semana en la revista Review of Scientific Instruments. Según los investigadores, los resultados de laboratorio son prometedores, pero el dispositivo aún tendría que demostrar eficacia en ensayos clínicos antes de su adopción generalizada como herramienta de diagnóstico.
«Nuestros resultados muestran que el dispositivo puede discriminar diferentes tipos y concentraciones de compuestos orgánicos volátiles relacionados con el cáncer con una precisión cercana al 100%», asegura Jin-can Lei, investigador principal y post-doc de la Facultad de Ingeniería Optoelectrónica de la Universidad de Chongqing, en la nota del American Institute of Physics recogida por Newswise. «El proceso requiere solamente unos 20 minutos.»
«No existen métodos sencillos, seguros y eficaces para detectar el cáncer de pulmón en su fase inicial», señala Lei. «Un gran número de estudios han demostrado que algunos tipos de compuestos orgánicos volátiles, procedentes de la oxidación del ácido graso insaturado en la carcinogénesis (proceso que da lugar al cáncer), sólo aparecen en el aire exhalado de personas con cáncer de pulmón, lo que los convierte en posibles biomarcadores del mismo.
El aparato puede detectar gases relacionados con el cáncer de pulmón en concentraciones muy bajas, por debajo de 50 partes por cada mil millones, explica Lei: Como una pizca de sal en 10 toneladas de patatas fritas.
Funcionamiento
El dispositivo consta de un plato circular de 50 milímetros de diámetro con una matriz de sensores, una cámara de gas giratoria diseñada especialmente, y un sistema de recolección y procesamiento de datos. La matriz es desechable y consta de 35 puntos químicamente sensibles uniformemente situados alrededor del borde. Los puntos se rellenan con siete tipos diferentes de materiales sensibles sintetizados en laboratorio (porfirina y sus derivados), que son los elementos sensores.
Al tratarse de una matriz de sensores, se produce un patrón de respuesta compuesto y único, una especie de «huella digital».
En los experimentos, Lei y sus colaboradores utilizaron cuatro compuestos orgánicos volátiles relacionados con el cáncer de pulmón: p-xileno, estireno, isopreno y hexanal. Una fuente de luz con láseres de tres longitudes de onda diferentes excita los espectros de fluorescencia de la matriz. El espectro resultante se compara con la base de datos de los gases, para identificar y cuantificar su presencia.
El siguiente paso en la investigación, señalan los científicos, es perfeccionar el método y establecer una base de datos completa de la fluorescencia de los gases relacionados con el cáncer de pulmón.