La Líder de la minoría demócrata de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, sostuvo durante una rueda de prensa en La Habana que «una de las razones por las que nos gustaría ver el levantamiento del embargo es que ha pasado mucho tiempo desde que fue impuesto y es una medida sin éxito«.
Nancy Pelosi viajó a La Habana al frente de una delegación de congresistas del Partido Demócrata para reunirse con el canciller Bruno Rodríguez así como con miembros de la Asamblea Nacional del Poder Popular y con representantes de la sociedad civil cubana.
Pelosi agregó durante una conferecia de prensa en la capital cubana que la aspiración es «aumentar las relaciones» bilaterales entre ambos países en las esferas que las dos partes consideren provechosas, como puede ser el plano político, el cultural y el económico. Sin embargo, la líder de la minoría demócrata reconoce que pese al apoyo tanto republicano como demócrata para acabar con las restricciones comerciales, financieras y económicas impuestas a cuba hace más de cincuenta años, este fin al bloqueo no cuenta con un consenso total que facilite poner fin al embargo de forma rápida y efectiva.
El bloqueo sólo puede ser levantado por el Congreso norteamericano, compesto por miembros muy conservadores que se oponen rotundamente a que esto suceda. Durante la conferencia de prensa, la líder demócrata afirmó que buena parte de los miembros del Capitolio considera esencial cumplir la exigencia cubana de que la Isla sea excluída de la lista de países patrocinadores del terrorismo.
Pelosi sostuvo que todos los encuentros que se han llevado a cabo las últimas semanas entre representantes estadounidenses y cubanos «han sido muy fructíferos«. «Este ha sido un gigantesco paso hacia delante, estamos promoviendo una nueva relación porque tenemos muchas cosas que compartir, con beneficios para las dos partes«, puntualizó la líder demócrata.
El congresista de Massachussets, Jim McGovern, se refirió durante esta visita a la neceisdad de que el liderazgo republicano permita la discusión y la votación de los proyectos orientados a eliminar estas sanciones unilaterales impuestas en 1962 a Cuba. El congresista de Minnesota por su parte reconoció que el bloqueo «es una política que no tiene sentido» ya que las restricciones que imponen «dañan a ambos países«.
El próximo 27 de febrero tendrá lugar en Washington D.C la segunda ronda de negociaciones y conversaciones entre representantes estadounidenses y cubanos para tratar de restablecer las relaciones diplomáticas bilaterales entre ambos países e iniciar así el proceso que podrá fin al bloqueo de la isla.
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