En entrevista con un medio electrónico, el diputado por la región de Magallanes, Gabriel Boric se refirió a los últimos sucesos y escándalos políticos que ha atribuido en otras ocasiones a la «colonización de la política». Boric comienza su segundo año como honorable diputado de la República, tras un período en el que su popularidad ha sido evidente a través de redes sociales, pues se ha levantado como una de las pocas voces respetables del Parlamento. Sus intervenciones se difunden en la red con un nivel de viralización pocas veces visto en un político, y seguramente la razón radica en que el ex dirigente estudiantil se ha mantenido firme en la crítica y en poner el acento donde importa.
Sobre la «arista SQM» del caso Penta, Boric señaló que la prensa ha jugado un rol importante en la medida en que se han ido conociendo estos nuevos antecedentes, considera positivo que «los medios de comunicación estén fiscalizando de esta manera a quienes gobiernan». Sin embargo, aseguró que no lo sorprendió mucho porque «era por todos sabido de que la colonización del empresariado a la política era y sigue siendo un problema transversal para la política chilena. Si bien quizás esto tiene sus raíces más profundas en la derecha heredera de la dictadura cívico militar, también influyó de manera sustantiva en la Concertación durante los 20 años que fue Gobierno y sigue influyendo hasta hoy a la Nueva Mayoría».
Consultado sobre el caso Cascadas y Julio Ponce Lerou -.ex yerno de Pinochet- Boric dijo «que la historia de Julio Ponce es un poco la historia de parte del empresariado chileno. De ese empresariado que se hizo rico con las privatizaciones totalmente ilegítimas de fines de la dictadura, de fines de los años 80. Que sus negocios florecieron durante los gobiernos de la Concertación, sin que nadie los tocara. Y que, yo me imagino que, a través de esa impunidad en que se vieron y sintieron que nadie los podría tocar, empezaron a generar vínculos hacia la política (…) el caso de Ponce es bien paradigmático de cómo una persona que se vio favorecida por todo lo que fueron las privatizaciones de la dictadura finalmente terminó amasando su fortuna durante los gobiernos de la Concertación y después termina estableciendo vínculos con personeros transversales en materia política. En los directorios de las empresas Cascadas estaba por ejemplo Osvaldo Puccio y otra serie de altos cargos de los gobiernos de la Concertación, la derecha y la dictadura.
En cuanto a los antecedentes que vincularon al senador socialista Fulvio Rossi en la «arista SQM» del caso Penta, Boric fue cauto en decir que no tiene ningún antecedente y sostuvo que sería irresponsable establecer un juicio. Sin embargo, aseguró que el senador debe primero, aborgar «porque se investigue si hubo boletas falsas o no y si ha recibido financiamiento, tanto para la campaña como para el ejercicio de la senaturía por parte de empresas mineras. Y si es así, por qué montos, por cuánto tiempo y a cambio de qué».
Gabriel Boric, militante de la Izquierda Autónoma se ha referido en varias ocasiones al vínculo entre la política y los negocios. Consultado en esta entrevista de The Clinic por el anuncio del Gobierno sobre la creación de un marco institucional que regularice este nexo entre políticos y empresarios, el diputado señaló que «las reacciones tienen que ir en dos direcciones: una hacia el futuro, para que esto no vuelva a suceder y en eso creo que es el rol tanto del Ejecutivo como del Congreso de crear marcos institucionales que mejoren la transparencia, la fiscalización y sobre todo que establezcan un cortafuego potente entre dinero o empresariado y política. Y segundo todo lo que hay detrás, de lo que haya sucedido. Me sigue pareciendo impresentable que gente como Ena von Baer o Iván Moreira (en la foto) sigan votando en el Congreso dado el carácter ilegítimo del financiamiento de sus campañas. Y si es que se descubriera algo de estas características en cualquier otro parlamentario, sea de la Concertación, independiente o lo que sea, pensaría exactamente lo mismo».
Para el diputado y ex dirigente de la Fech, la actitud de Dávalos fue «negligente» y las declaraciones de la Presidenta «insuficientes», además subraya que no se ha hablado en profundidad de la relación de la Concertación con Luksic. Cree necesario saber si «¿Hay más vínculos o no? ¿Hubo financiamiento de Luksic a las campañas de la Concertación? Creo que esos son temas interesantes de investigar, porque no cualquier chileno dueño de una Pyme consigue una reunión con el vicepresidente y dueño de un banco y menos un crédito por esa cantidad para hacer un negocio que en sí es cuestionable éticamente por la especulación con el suelo inmobiliario. Hay que profundizar la investigación. Creo que esto sirve para tener una señal muy potente de la institucionalidad para que estos escándalos no se produzcan».
Boric se refirió a que en su trabajo como parlamentario la sensación de que hay una clase privilegiada se profundizo. A su juicio hay una clase que no quiere que sus intereses sean tocados. «Muchas veces la clase política actúa con obsecuencia frente a la elite y uno de los objetivos por los que yo llegué al Congreso es tratar de romper con esos miedos y enfrentar esas posiciones que son unas de las causas de la profunda desigualdad en Chile. Creo que tanto en materia de Educación, Vivienda y Pensiones, así como en el acceso al dinero se manifiesta esta relación enferma con esta pequeña elite que, como decían Los Prisioneros, se sienten con el derecho heredero a ser los dueños de América del Sur». En cuanto a las tareas que vienen para la Izquierda Autónoma, Boric señaló que Estamos en un proceso largo de constitución política como Izquierda Autónoma, creemos que hay espacios para nuevos referentes de izquierda fuera de lo que ha sido el duopolio derecha-concertación y estamos trabajando fuerte para consolidar esa posición y en cuanto a su puesto en el Parlamento aseguró que quiere hacer sentir orgullosos a los magallánicos por las labores que enfrentara este nuevo año legislativo.