Tres meses después: Los cabos sueltos que enturbian la desaparición de Kurt Martinson

Más de 90 días han pasado desde la enigmática desaparición del guía turístico Kurt Martinson en San Pedro de Atacama. Enseguida analizamos siete cabos sueltos que todavía no encuentran respuesta.

1. La denuncia de presunta desgracia

La primera sospecha de la familia recayó en la actitud del jefe de excursión del Hotel Alto Atacama, Amaru Sutil Zárate, quien colocó la denuncia de presunta desgracia de Kurt el día 24 de noviembre de 2014, a pocas horas de que la gerencia del último recinto en donde “se le vio con vida” lo despidiera por razones que no están claras.

De hecho, el despido mismo fue desmentido por el hotel a Canal 13 y luego confirmado a través de una misiva que llegó hasta la pensión de Kurt en plena desaparición. Estas contradicciones, a juicio de los Martinson, deberían orientar las pesquisas hacia los ex empleadores del joven.

2. Allanamiento tardío del Hotel Alto Atacama

La vocería del Ministerio Público ha entrado en conflictos constantes con la familia a través de los medios de comunicación. Y es que antes de irse de vacaciones, el fiscal jefe de Calama, Cristian Aliaga, descartó de plano la posibilidad de que en el caso de Kurt se vislumbrara la intervención de terceras personas.

Mayor rechazo generó el hecho de que los fiscales preferentes Raúl Marabolí y Eduardo Peña allanaran las dependencias del Hotel Alto Atacama casi 35 días después de la desaparición de Martinson.

La tardanza en esta pesquisa, según ha explicado latamente el hermano de Kurt, Francisco Martinson, en varias entrevistas, se debe también a que la búsqueda se orientó principalmente al desierto, basado en la primera versión de Amaru Sutil que apuntaba a un supuesto desvanecimiento psicológico del desaparecido, y a testimonios contradictorios de gente que no lo conocía.

3. Los videos desaparecidos

Otro hecho que genera suspicacia en la familia es que el hotel – perteneciente a una cadena del empresario Christoph Schiess y del ex vicepresidente de Cochilco, Andrés Mac-Lean –, sólo habría registrado imágenes desde ocho cámaras distintas el día del extraño “despido” de Kurt, en circunstancias de que los otros días operaron más de treinta dispositivos.

4. El celular

Un misterio que todavía incomoda a la familia es el hallazgo del celular de Kurt Martinson. Éste fue alertado por un sujeto que estaba en la ciudad de Santiago y que presuntamente lo tomó luego de ser recogido en las proximidades del Hotel Alto Atacama.

De acuerdo a las declaraciones de otro de los hermanos de Kurt, Paul Martinson, al diario El Mercurio de Calama, el teléfono fue bloqueado mientras se encontraba en custodia policial y todavía no ha podido ser periciado ni desbloqueado por expertos.

5. Los documentos

El carnet de identidad que portaba Kurt Martinson fue hallado días después de saltar la alarma por el descubrimiento de su celular. Esto ocurrió en un lugar que había sido revisado previamente y que no coincide con la hipótesis del “desvanecimiento psicológico” en el desierto.

A juicio de Francisco Martinson, es necesario investigar la proximidad del sitio del hallazgo de los documentos con el lugar de trabajo de la madre de Amaru Sutil Zárate, el ex superior de Kurt que denunció la presunta desgracia del guía en Carabineros.

6. Contrabando de drogas

La desaparición de Kurt Martinson abrió un abanico de preguntas sobre la escasa fiscalización de las denominadas “fiestas clandestinas” en el desierto y la proliferación de drogas duras en San Pedro de Atacama.

Abrió, además, el debate sobre la escasa tarea de las policías para erradicar el tráfico de drogas en la frontera con Bolivia, un hecho que fue reconocido por la edil de la comuna, Sandra Berna Martínez, en una entrevista que efectuó a un medio local sobre la desaparición de Kurt.

Aunque la posible conexión tovavía es materia de investigación, durante las primeras semanas del caso, en redes sociales, fue ampliamente comentada una publicación de blog que entregó detalles sobre supuestos traficantes y consumidores de droga ligados al enigma policial, resaltando entre ellos un familiar del senador Fulvio Rossi y de un seremi de Gobierno.

Según se enteró El Ciudadano, la persona que aportó públicamente esta información ya declaró con la PDI. Este medio no ha podido verificar la veracidad de las acusaciones, aunque sí constató la presencia de otros empresarios túristicos que poseen antecedentes penales por tráfico de estupefacientes en la zona.

7. Las filtraciones a la prensa

Molestia ha causado en la familia de Kurt Martinson que los órganos investigadores filtren a la prensa una serie de detalles sobre las pesquisas, sobre todo aquellas diligencias que fundamentan la tesis primaria de la Fiscalía en el sentido de que no hubo participación de terceros en la desaparición, en una forma de propaganda.

Ante la filtración de antecedentes psiquiátricos de Kurt – objeto de un mal diagnóstico, según alega la familia – se presentó una denuncia formal ante el Ministerio Público por la vulneración del secreto que afecta a la carpeta investigativa. Esta causa paralela está siendo sustanciada por el fiscal Andrés Godoy.

En un reciente comunicado, la Fiscalía precisó, sin embargo, que no abrió ninguna investigación administrativa en contra de los fiscales preferentes Marabolí y Peña. Éstos, para el pesar de los Martinson, continúan careciendo dedicación exclusiva en el caso.