Al menos 32 personas han perdido la vida al este de Ucrania tras la explosión de grisú de una mina de carbón situada en la provincia de Donetsk, zona controlada por los separatistas prorrusos. El Departamento de Emergencias de Donetsk se apresuró a subrayar que el siniestro había sido totalmente accidental.
El presidente del Parlamento ucraniano, Vladímir Groysman, señaló esta mañana durante la sesión matutina de la cámara que había tenido lugar «una tragedia en la mina Zasiadko. Hay víctimas mortales, hasta el momento 32 personas», declaró. Aún no es posible determinar el número exacto de muertos debido a que antes de acceder al lugar de la explosión los servicios de rescate deben extraer todo el gas venenoso.
Yuliana Bedilo, vocera del Ministerio de Situaciones de Emergencias de la República Popular de Donetsk, señaló que en la mina quedaron atrapados las 73 personas que estaban trabajano allí en el momento de la explosión. Bedilo insistió también ante la prensa en que la explosión había sido un accidente «y no producto de un ataque de artillería«.
La explosión se produjo a las 5:20 horas -de Ucrania- en la mina Zasiadko, una de las explotaciones hulleras más importantes de Ucrania. La mina coleccionaba un largo historial de accidentes, el mayor de ellos registrado en noviembre de 2007 cuando murieron 101 trabajadores.
Donetsk ha sido desde abril del 2014 escenario de luchas entre las fuerzas armadas de Kiev y los separatistas prorrusos a partir de la autoproclamación de la región como Estado Federal de Nueva Rusia bajo el nombre de República Popular de Donetsk.