Así como el dolar sirvió al comercio internacional, tal lo hizo el euro para el viejo continente, las naciones latioamericanas hermanadas en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), han decidido dar punta pie inicial a la creación de su propia moneda.
La idea que de acuñar, imprimir o poner en sistemas electrónicos, nuestras propias monedas cooperativas, como complemento al desarrollo de una economía soliodaria, es una tecnología que El Ciudadano siempre ha considerado libertaria para nuestros pueblos, por lo que no podemos dejar de manifestar nuestra alegría ante la decisión tomada por las naciones más progresistas del continente.
El inicio de la circulación está programada para fines de enero del 2010, según informó Ernesto Medina, presidente del Banco Central de Cuba, tras la VIII cumbre del Alba, anunciando que la implementación inicial se llevará a cabo en 5 de los 9 países que integran el bloque.
Las iniciadas serán Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia y Ecuador, países que poco a poco podrán librarse de la inestabilidad bursátil del dólar para hacer sus transacciones internacionales.
La valoración inicial del Sucre será de 1,25 dólares y se une a emprendimientos regionales como el del Banco del Sur, que tiene presencia en gran parte de los países del continente, menos en Chile.
La autoridad en la materia explicó a CubaDebate que por el momento «las transacciones serán entre los bancos centrales de los Estados mencionados, mientras que las empresas locales continuarán sus operaciones y contratos en las respectivas monedas nacionales».
El Ciudadano
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