Se pronosticó un panorama de intensas lluvias en el sur, lo que significa que los daños provocados por la erupción del Calbuco aún no parecen cercanos a desaparecer. A raíz de los temporales que se avecinan, el Sernageomin le advirtió a la población que probablemente se encuentren con “lahares secundarios”, es decir, pequeños aluviones volcánicos provocados por el movimiento que realiza el material piroclástico del volcán (la nube de cenizas que se forma, o fragmentos de lava que circulan a través del aire y del vapor).
El Servicio Nacional de Geología y Minería dio a conocer el mapa de riesgo para visualizar de mejor manera las localidades que podrían verse afectadas por el fenómeno vulcanológico. El Calbuco se encuentra en el límite entre Puerto Montt y Puerto Varas, entre el lago Llanquihue y el lago Chapo, así que los lugares como Ensenada, Alerce, Colonia Río Sur, Correntoso, las vías entre Puerto Varas y la localidad del país vecino, Bariloche serán los posibles afectados en esta situación.
Gustavo Fuentealba, académico del Departamento de Ciencias Físicas de la UFRO, quien además ha abordado la vulcanología hace más de 30 años, en conversaciones con El Ciudadano señaló que un lahar, se define a la acción de la lava, cuando “de alguna forma sale lava, la que es capaz de derretir hielo, el cual se desplaza arrastrando materia y baja por los cauces de los ríos, debido a la presencia de lava fundiendo el hielo”.
Además, el experto informó que los lahares secundarios se producen por una remoción de masas, a través de un movimiento telúrico. El fenómeno ocurre debido a la soltura de la funda y tiene como consecuencias que se arrastre el material que ya está depositado. El académico señaló que en general los lahares “presentan una situación de riesgo en las zonas de cauce porque llevan mucha energía y tienen un volumen bastante grande, además pueden arrasar con todo lo que encuentren a su paso”.
Los lahares son muy rápidos y su densidad y alcance se determinan principalmente por la cantidad de material que esté bajando y por las pendientes que tenga el lugar, Fuentealba explicó que si es un lugar con mucha pendiente, el lahar llegará más lejos, de hecho, existen casos en que estos flujos han alcanzado hasta 40 kilómetros, “siempre depende de la cantidad de material y el tipo de pendiente del lugar”.
Con respecto al pronóstico de fuertes lluvias que amenaza la región de Los Lagos, el vulcanólogo apuntó a que podrían generarse lahares secundarios, “porque el material está suelto y bajará”. Apuntó también a que el Sernageomin ya informó sobre este posible escenario, el cual podría verse aún más complejo si las lluvias son de carácter más prolongado, debido a que podría finalmente endurecerse la materia desplazada y convertirse en cemento, es por eso que las acciones de limpieza deben desarrollarse rápidamente”, señaló Fuentealba.
Hasta el momento se espera una evolución de la limpieza en los lugares afectados, además, los pobladores de las zonas siguen a la espera de mayor información en cuanto a las medidas y actitudes que deben tomar frente a la columna de cenizas, los lahares y el resto de problemáticas que vienen arrastrándose desde la sorpresiva erupción del macizo, el pasado miércoles en la tarde.