A diferencia de la del sol, en la luna existe una electricidad que tiene pulso, magia, energía y un trance hechizante.
Es cuando los niños y los fugitivos se escapan y cuando los chicos se meten en problemas. Es cuando el sufrimiento toma tu vida y las personas solitarias buscan comodidad.
Es durante la noche cuando vemos nuestros verdaderos deseos. Es el instante en que reflexionamos acerca de nuestros momentos de infelicidad y esos anhelos que se encuentran brevemente cegados por el sol. Es justo ese momento en donde nos convertimos en poetas y filósofos o en mártires y asesinos.
Es cuando formamos pesares y odio del pasado que nos hacen daño. En ese instante nos ahogamos en nuestras lágrimas por medio de profundos sollozos que sólo se pueden derramar sobre las fundas de la almohada.
La noche es para la pasión, el fanatismo, el romance y los problemas. Es cuando lo tierno, auténtico y las partes suprimidas salen a jugar ante la mirada sin perjuicios de las estrellas. Son por todas esas cosas que no sueño que se puedan hacer bajo la luz del sol.
Es natural que las personas que se duermen temprano nunca experimenten los cambios psicológicos y emocionales que ocurren bajo la oscuridad.
Según “Psychology Today”, las personas inteligentes son más propensos a ser nocturnos que las personas con un coeficiente intelectual menor. Es un estudio a cargo de jóvenes estadounidenses, donde los resultados arrojados fueron que las personas inteligentes se van a la cama más tarde entre semana y los fines de semana que los menos inteligentes.
En la Revista de Estudios, Satoshi Kanazawa (psicólogo de la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres) informó que la media del CI (coeficiente intelectual) y los patrones de sueño se relacionan entre sí, lo que demuestra que quienes están despiertas bajo la luna son los seres humanos más inteligentes.
Este análisis se remonta a muchos años atrás, donde su idea afirma que incluso la gente primitiva se ha sabido que suben y bajan con el sol.
El promedio de cerebros son condicionados a seguir este patrón de sueño, mientras que los curiosos y los inteligentes se oponen a este patrón y buscan crear su propia cuenta. Es un desafío inconsciente que proviene de la negativa de aceptar la idea de atraer a las masas.
Estos hallazgos son reportados como tal:
La hora de acostarse y la hora de levantarse para los estadounidenses está entre los 20 por IQ (coeficiente intelectual)
CI bajo (75)
Días de la semana: 11:41 pm – 7:20 am
Fin de semana: 12:35 am – 10:00 am
CI normal (90 – 110)
De lunes a viernes: 12:10 am – 7:32 am
Fin de semana: 1:13 am – 10:14 am
CI muy brillante (125)
De lunes a viernes: 12:29 am – 7:52 am
Fin de semana: 1:44 am – 11:07 am
Las personas con un coeficiente intelectual menor a 75 se van a dormir a las 11:30 entre semana cuando son adultos jóvenes, mientras que los CI con más de 125 van a la cama después de las 12:30 pm.
Estos datos avalan la noción de cómo se sienten las personas de noche y la única en tiempo real es cuando todo el mundo se ha ido a la cama.
Solamente después de anochecer se aprende, absorbe y estudian los efectos del día. Es como una auto reflexión humana que muy pocos se toman el tiempo de hacer.
Tienen más cosas que ver las personas que luchan contra las ganas de dormir y exploran durante las noches, que muchos de los que siempre tienen los ojos cerrados.
Tienen tiempo para soñar despiertos
La mayoría de esos sueños no son posibles de tenerse durante el día ya sea por los amigos, la familia o el trabajo, hasta que al final del día los dejas correr. Son libres de estar en los espacios abiertos de tu mente, pueden estar en todos esos pensamientos que están debajo de tu escritorio o en ese montón de papeles. Es la hora más creativa y relajada del día.
Es por eso que al caer la noche sus lados más desinhibidos y apasionados son explorados. Es el momento exacto para dejar fluir los deseos más íntimos y tener la libertad que se esconde detrás de la luz del sol. La noche esta hecha para poner a prueba tus límites y retos de ti mismo.
Es el instante de profundizar en los rincones de tu mente y senderos desconocidos de tu subconsciente. Ese momento de auto expresión sólo puede ser liberado por las noches y evaluado durante el día.
Son anti-establecimiento
Dormirse hasta tarde, ha sido, es y siempre será un acto de rebeldía. Desde años atrás existe la evidencia de que la sociedad tolera a los amantes de la noche.
El trabajo académico «¿Por qué el búho nocturno es más inteligente?» publicado en la revista “Psicología y las diferencias individuales”, que estipula desde hace varios años que los seres humanos están destinados a trabajar durante el día y a dormir por la noche.
Mientras que los que desafían esta tendencia, es más probable que adquieran valores y preferencias que las personas menos inteligentes. Lo que convierte estos “nuevos valores” en un componente básico de líderes. Estas son características de revolucionarios, inventores y exploradores, aquellos que hacen sacrificios y desafían la presión social para seguir las masas.
No sería raro que las personas que duermen hasta tarde sean más curiosas por explorar algo durante la noche. Son más propensos a hacer descubrimientos, desafiar a la autoridad y querer expandir la mente, no sólo porque la gente les dice que es hora de dormir se supone que lo harán.
Son personas de mente abierta
Las cosas que les pasan durante la noche, no es posible que les sucedan en el día. La noche es la hora del desenfreno total, de las operaciones clandestinas y ocupaciones indecorosas.
Es la hora en que los poetas escriben, cuando los músicos perfeccionan los instrumentos, los genios tienen sus avances y los artistas cobran vida.
Y de acuerdo con “Esquire” también es la hora en que se tienen más relaciones sexuales. Informó que las personas que duermen más tarde compran más juguetes sexuales y tienen más relaciones sexuales que los que duermen temprano.
Los que permanecen despiertos anhelan los misterios que trae la noche y están expuestos a una serie de descubrimientos que los que se quedan dormidos temprano nunca sabrán. Es por eso que siempre están dispuestos a probar sus límites y explorar la oscuridad que aportará más luz cada día.
Son proactivos
Un pájaro por la mañana puede conseguir el gusano, pero el ave nocturna puede conseguir todo el frasco. Mientras que los que madrugan pueden ver el primer gusano arrastrarse por su camino hacia la superficie mojada y el ave nocturna llega antes de que se entierre bajo.
Sin duda levantarse temprano es proactivo, pero quedarse dormido hasta tarde es tan fructífero. Los que se quedan a dormir hasta tarde antes de salir en lugar de uno o dos que se levantan temprano, obtienen ganancias ascendentes.
Durante la noche hay ideas formuladas y tareas completadas que los que madrugan nunca llegan a terminar debido a que en la noche no hay un amanecer ni un nuevo día frente a ti. Pero por la mañana no sólo es la desolación de la noche y el fin de enormes proporciones de otro día.