El Ministerio de Obras Públicas (MOP), ratificó sus decretos apelados, en el marco del cumplimiento del plazo dado por la Corte de Apelaciones de Santiago a la Dirección General de Aguas (DGA), luego de que Hidroaysén interpusiera un reclamo por la negación de los derechos de agua por las reservas de caudales en los ríos Pascua y Baker.
Camilo Charme, gerente general de la compañía, señaló que la Dirección General del agua posee una facultad legal excepcional, razón que llevaría al organismo a mantener un uso irregular de dicho poder.
En tanto la DGA, utilizó el Código de Aguas para respaldar su posición, a través de causales existentes en el como “Circunstancias excepcionales” y de “interés nacional” o “intereses de la nación”, que establecen el poder otorgado al Presidente, para que, mediante un decreto fundado, pueda disponer la negación parcial de una petición de aprovechamiento de aguas.
Fundamentalmente la DGA desea la conservación ambiental en la preservación de la naturaleza, en el desarrollo local de la cuenca del río Pascua, por lo que defiende su posición frente a la hidroeléctrica en la región de Aysén, ya que están recurriendo a actos administrativos válidos, “elaborados por el MOP”, en el círculo de sus competencias y cumpliendo los requisitos establecidos por el Legislador para estas situaciones.
Juan Pablo Orrego, director de la ONG Ecosistemas, identificó diversas falencias en el Sistema de Evaluación Ambiental Chileno, que al principio había aceptado el proyecto pero que luego, por medio del Comité de Ministros, lo rechazó.
El ecologista señaló que el Gobierno mantiene una postura muy política frente al caso y al encontrarse sujeto a las leyes chilenas, por lo tanto, las decisiones están más apegadas al ámbito corporativo y sectores de grandes empresas que podrían influenciar el término del debate.
Para Erwin Sandoval, el asesor jurídico del equipo interdisciplinario Vía Ambiental, a pesar de que existen instancias en que la empresa podría impugnar lo resuelto por la Corte de Apelaciones, aún existe un requisito que difícilmente llegarán a cumplir:
- Disponibilidad de caudales sin efectos contrarios en terceros
“Más allá de la argumentación artificiosa que pueda decir la empresa, tenemos el hecho de que la Unesco ha señalado que los ríos más caudalosos de Latinoamérica, como el Baker, presentan escasez hídrica y son completamente sobre otorgados” . declaró Sandoval.
Han sido años de pelea por la conservación natural en la región de Aysén, en estos momentos la ciudadanía debe conocer, apoyar y respaldar la defensa a través de los distintos organismos que están al filo de muchos debates y discusiones sobre los proyectos que matan el medio ambiente en zonas que no han sido del todo explotadas.