Kurdos y turcos hermanados por el socialismo libertario

Durante un siglo, el pueblo kurdo, una nación dividida bajo los Estados turco, iraquí, iraní y sirio, no ha tenido el derecho a existir


Autor: Wari

Durante un siglo, el pueblo kurdo, una nación dividida bajo los Estados turco, iraquí, iraní y sirio, no ha tenido el derecho a existir. Se les ha negado el derecho a la auto-determinación, a organizarse como les acomode, a poseer su tierra, a vivir su cultura, incluso a hablar su lengua, mientras son aplastados bajo el peso de una organización semi-feudal extremadamente atrasada y autoritaria creada para fines de control social.

“¿Kine em?”. ¿Quiénes somos?, dice una popular canción kurda. No es fácil definir en un par de palabras lo que el pueblo kurdo es: no son un grupo étnico, no tiene unidad religiosa e incluso su lengua tiene dialectos que son difíciles de entender entre sí. Pese a esto, se reconocen a si mismos como kurdos. Y han estado dando una dura lucha en varios Estados (Irán, Irak, Siria y Turquía), para obtener el derecho a existir. Como resultado, han sido asfixiados con gas, masacrados y desplazados por millones.

Pero la lucha kurda sigue contra viento y marea, con una fuerza impresionante, alimentada por cada una de las comunidades del Kurdistán; ésta no sólo es una lucha contra el Estado colonial, contra las fuerzas imperialistas que a menudo andan tras de éste, sino que, de igual manera, es una lucha contra la misma clase feudal de ricos terratenientes kurdos que han sido aliados claves de los Estados coloniales y que han amasado enormes riquezas con esta situación. No nos encontramos frente a una mera lucha nacionalista en el sentido estricto de la palabra; estamos frente a un conflicto social, una lucha por la completa emancipación del pueblo kurdo de las cadenas del colonialismo y el capitalismo. Es una lucha por la liberación nacional en su sentido más íntegro.

Durante la celebración de Newroz en Estambul (foto cabecera), el año nuevo y día de la resistencia kurda (21 de Marzo), una impresionante celebración donde 300.000 kurdos se reunieron a pesar del acoso policiaco y militar, conocimos a un grupo de socialistas libertarios, tanto turcos como kurdos, los cuales tienen una organización llamada Ahali, que significa “Pueblo” en turco, y que activamente han tratado de llamar la atención sobre la cuestión kurda a las organizaciones obreras turcas, dando su apoyo como libertarios a esta lucha, en la forma que resulte más conveniente.

Tuvimos la oportunidad de intercambiar algunas opiniones sobre la cuestión kurda algunos meses atrás. Aquí reproducimos la entrevista con la esperanza que entregará algunas luces sobre la cuestión kurda y el complejo escenario que el socialismo libertario enfrenta en Turquía, donde esta lucha no puede, y no debe, ser ignorada.

¿Cuales son las cuestiones básicas, los problemas principales, en la lucha kurda hoy?

La lucha del pueblo kurdo, el cual ha estado bajo la presión generada por la hegemonía de cuatro naciones Estado, como son Irán, Irak, Siria y Turquía, se torna cada vez más clara. Actualmente, tales luchas anti-imperialistas han adquirido una importancia creciente en el Nuevo Orden Mundial Capitalista. Lejos de las similitudes globales con otras naciones oprimidas, la lucha kurda representa una “guerra en preparación” en el Medio Oriente por cientos de años.

El carácter histórico de la lucha kurda está actualmente en el centro del movimiento rebelde. El pueblo kurdo ha sido ignorado, asesinado, los Estados les han prohibido hablar su lengua o vivir acorde a su cultura. Así es que la libertad de vivir en sus tierras sin la tutela del Estado turco, la libertad de hablar la lengua kurda, la libertad de vivir de acuerdo a la cultura kurda, constituyen las directrices de su lucha.

La política de asimilación del pueblo kurdo se arrastra desde los primeros años del Estado turco, y las resistencias a estas políticas se dieron primero en Ağrı [1], Dersim [2] y con los rebeldes de Sheikh Said [3]. Este carácter rebelde de los kurdos significó que el Estado reformuló métodos más radicales de asimilación. La raíz de la lucha actual debe ser buscada en los primeros años del Estado turco y quizás en las últimas décadas del Imperio Otomano. La resistencia al proceso de hegemonía del Estado turco fue respondida con genocidio, particularmente en Dersim, y desplazamiento forzoso.

La lucha kurda ha sido en gran parte una lucha campesina. Cuéntanos sobre el problema kurdo de la tierra…

Como no fue posible para el Estado turco tomar control de las tierras de los kurdos usando la fuerza directa, a pesar de los bombardeos masivos, el Estado atacó las estructuras económicas del Kurdistán, apuntando a controlar a los kurdos económica y políticamente.

El sistema de los Agha, una forma particularmente atrasada de feudalismo, fue apoyado entonces por el Estado. A través de este sistema de distribución de la tierra, el estado planeó atacar directamente la agricultura, la cual era –y es- crucial en la economía del Kurdistán. El Agha era y aún es un jefe tribal al que el gobierno apoyaba económica y tecnológicamente. De este modo se tornaron muy poderosos en términos de posesión de tierra, así como del apoyo tecnológico en lo que refiere a producción agrícola. Por lo tanto, los campesinos kurdos fueron obligados, primero, a usar la tecnología del Agha para poder producir. Pero en compensación, debían entregar la mitad de la producción al Agha. Este sistema de “mediería” no duró por mucho tiempo; pronto los campesinos empezaron a vender sus tierras al Agha y se convirtieron en trabajadores rurales bajo su autoridad. Otros emigraron tras vender sus tierras.

Además del rol económico, el Agha cumple también un rol político. Los gobiernos los usan para comprar votos de los kurdos y para integrar a los kurdos al sistema. Este carácter político está también cubierto por algunos aspectos religiosos del sistema. El Estado turco incluso entrega cupos en el parlamento a los Aghas para que representen al pueblo kurdo. [4]

Bajo estas circunstancias –asimilación, genocidio, ignorancia, pérdida forzada de las tierras, habiendo entregado la representación política a los Aghas, etc.- el pueblo kurdo dijo “Edi Bese” –Basta- y empezó a resistir como pueblo kurdo, en nombre del derecho a hablar su lengua, en el nombre de su derecho a vivir de acuerdo a su cultura, en el derecho a poseer su propia tierra.

Hoy, la lucha no es sólo para resistir a estas condiciones impuestas por los terratenientes feudales, sino que también es contra las condiciones impuestas por el nuevo orden mundial capitalista, o las nuevas caras del poder como el neo racismo, el sexismo, etc. Cuestionando las nuevas facetas del poder y de la opresión han hecho la lucha más duradera.

Como libertarios, ¿cual es su perspectiva sobre la lucha kurda?

El Estado turco ha denominado a esta lucha como “el problema kurdo”, y así también es denominado en la literatura política internacional. Nosotros insistimos en que ese no es el asunto, el tema de fondo es “el problema de asimilación por parte del Estado turco”. Como libertarios que cuestionamos todo tipo de relación de poder, no podemos cerrar nuestros ojos a la resistencia de los kurdos. El pueblo kurdo se ha confrontado con la real cara del Estado desde el nacimiento de la república moderna de Turquía. Su lucha se ha nutrido de la tradición rebelde de estas tierras.

Como Ahali, damos importancia a cómo podemos influenciar al pueblo para poder establecer una tradición libertaria en estas tierras. Con este objetivo a largo plazo en mente, tratamos de actuar y planeamos nuestras acciones. Así que es lógico para nosotros solidarizar con los camaradas en la lucha kurda, sin vacilar respecto al carácter nacional de ésta.

¿Crees que las pasadas elecciones (abril), que muchos ven como una victoria del DTP, tendrán, de alguna forma, un rol positivo en la lucha kurda?

Las últimas elecciones locales parecen haber tenido un rol positivo en la lucha kurda. El DTP, partido representante del movimiento independentista kurdo, ganó una municipalidad metropolitana, siete ciudades y cincuenta municipalidades provinciales en las elecciones locales del 2009.

El significado de estas elecciones es importante. Éstas ocurrieron en medio de la polémica en torno a si clausurar o no al DPT y detener las expresiones políticas de las luchas de independencia. Con el resultado de estas elecciones, los kurdos reaccionaron ante esta polémica. No sólo estaba la posibilidad de clausura del DTP, sino también estaba la polémica sobre Öcalan y sobre si la lucha separatista había tenido alguna repercusión en los resultados. Al dar sus votos a un partido proveniente de una tradición que el Estado turco ha siempre censurado y bloqueado, los kurdos estaban diciendo que “el DTP representa al pueblo kurdo y aquí estamos”.

En tales condiciones, en esta ocasión no cuestionamos el problema de la democracia representativa, a pesar de que estemos en contra de ella.

Por otra parte, creemos que es importante destacar que las actividades de las municipalidades libres son una forma de política participativa, a nivel local. Junto con el parlamento público, los consejos de jóvenes y mujeres y organismos similares, el carácter democrático del DTP va más allá de la democracia tradicional.

Los municipios que fueron ganados por el DTP, en las elecciones locales, los entendemos como un triunfo mayor que los puestos en el parlamento turco. Podemos comprender mejor esto si comparamos la popularidad de Osman Baydemir, el alcande de Diyarbakir, con la de Ahmet Türk, el parlamentario y co-presidente del DTP.

Como dijimos, no creemos en la democracia representativa o en las elecciones burguesas. Pero bajo estas condiciones particulares, que vieron al DTP casi clausurado y de cara al avance de nuevos elementos en la lucha kurda, como son el dar más importancia a la participación pública directa, entendimos el apoyo al DTP en el Kurdistán como una expresa oposición al Estado turco, y esto se expresó como la voluntad del pueblo kurdo.

Hemos escuchado que las mujeres kurdas son muy oprimidas por las tradiciones, y tales historias han circulado (femicidio por “honor”, etc.) y han sido promovidas por el Estado turco con la intención de exponer al pueblo kurdo como un pueblo atrasado. ¿Cuánto de esto es verdad? ¿Cuál es la posición del movimiento kurdo de liberación nacional respecto de la mujer?

Primero, debemos considerar que Öcalan, quien consolidó la teorización de la lucha kurda, puso la liberación de la mujer en el meollo del asunto. Esto, porque indicó que las mujeres fueron la primera clase social que cayó bajo la autoridad, por lo que la liberación social debe empezar con la liberación de la mujer. El resultado de esto es que la lucha kurda le da una gran importancia a la organización independiente de las mujeres tanto en la lucha armada como en la arena política y social. Hay un sistema de co-gobierno en el DTP, hay consejos locales de mujeres, y hay organizaciones de mujeres tanto en la guerrilla como en las ciudades kurdas; esto debe ser visto como la aplicación práctica de esta teoría.

También hay que decir que las mujeres kurdas son de las mujeres más politizadas del mundo. Puedes ver esto cada 8 de Marzo, donde el número de mujeres kurdas en las calles son hasta 30 veces mayor que en otras partes del mundo.

El sistema de los Aghas considera a las mujeres como si no fueran nada más que mercancías. Pueden ser intercambiadas a cambio de dinero o ganado. Las mujeres están imposibilitadas de tomar decisiones sobre sus propias vidas y son aisladas de la vida social, política y económica. Al ser sostenidos por el Estado, el sistema de los Aghas juega un importante rol en el aislamiento de las mujeres de la vida económica. Según ellos, la mujer es innecesaria en la actividad laboral e inadecuada para el trabajo. Se espera que las mujeres se queden en la casa, encargadas de las tareas domésticas y de criar los niños.

Este tipo de marginación, combinada con factores religiosos, lleva a los hombres a reclamarse como dueños de la mujer, que no es más que una propiedad del hombre y las ven sólo como un objeto. Se convierten en un símbolo de honor y cualquier violación de las viejas costumbres implica que puedan ser asesinadas por honor.

El Estado es en apariencia muy crítico de los asesinatos por “honor”. Sin embargo, como ya hemos dicho, los Aghas son fuertemente apoyados y, en realidad, fueron creados por el Estado. Dado esto, es obvio que las muertes por “honor” son, en su mayoría, causadas precisamente por la organización estatal, a pesar de sus aparentes “esfuerzos” para detener esta situación.

¿Cuales son las dificultades principales a la hora de construir vínculos entre los movimiento populares kurdos y turcos?

El movimiento de izquierda turco está enfocado, principalmente, en el movimiento de trabajadores. Así que podemos decir que ven la lucha kurda como un problema secundario que puede ser tratado después de la revolución. No le dan la importancia suficiente y no demuestran mucha solidaridad con el pueblo kurdo.

Quizás, la razón más importante de esta falta de “interés” en la cuestión kurda, es el hecho de que algunos grupos de “izquierda” turcos, aún ven a Mustafá Kemal, el autoritario fundador de la republica turca, como un héroe anti-imperialista, y aceptan sus ideas nacionalistas. Lo ven como una suerte de “Che” Guevara, mientras ven la lucha kurda como una “herramienta” de EEUU para dividir Turquía en dos, para luego “devorar las dos pequeñas partes de la torta”. Así es que el enfoque anti-imperialista inicial se torna en uno nacionalista, que no vacila en culpar a los kurdos como los causantes de los problemas y como títeres del imperialismo de los EEUU.

Por otro lado, el movimiento popular turco, al ser “modernista”, está dividido respecto del movimiento kurdo, cuyas teorías se acercan al socialismo libertario en sus incesantes ataques al centralizado Socialismo de Estado. Especialmente, durante estos últimos diez años, el movimiento kurdo ha virado desde una lucha Estatal-centralizada, a una idea más integral de Revolución Social. A veces, a esto se le llama “confederalismo-democrático”, otras, “comunalismo democrático”, etc. Pero podemos decir que esta teoría se enriquece con las perspectivas de la ecología social, inspirada en las enseñanzas de Murray Bookchin.

¿Qué esperan de los movimientos de solidaridad internacional y de tendencia libertaria?

La globalización del poder hace que la resistencia, hoy, sea global. El tener información sobre la resistencia alrededor de todo el mundo nos da esperanza y fuerza para hacer frente en la lucha contra el sistema. Creemos que podemos expandir nuestra resistencia con esta red de solidaridad internacional. Nosotros, al igual que todos los que se oponen al capitalismo, al racismo, al sexismo, a la autoridad del Estado, etc., nos necesitamos mutuamente en las actuales circunstancias, cuando el capitalismo controla cada vez más la vida de los individuos y los Estados-Nación juegan un rol mucho más estratégico en este nuevo orden global capitalista.

Creemos que podemos aprender muchas cosas de las experiencias de los demás pueblos. En primer lugar, es realmente importante que compartan su experiencia con grupos como el nuestro, menos experimentados. Este compartir puede asegurarnos el resolver los problemas que enfrentamos mientras diseminamos el socialismo libertario en nuestras tierras.

Los socialistas libertarios, más que nada, se han organizado por objetivos a corto plazo, con pequeñas campañas, a cargo de pequeños grupos, hasta ahora. La solidaridad internacional es crucial para que el socialismo libertario adquiera un carácter social, con objetivos a largo plazo. Necesitamos compartir nuestras experiencias en este proceso de objetivos a largo plazo. Tenemos el espíritu de 1850, pero estamos activos desde el 2004. Esperamos de ustedes, por ejemplo, que tienen una tradición revolucionaria en América Latina, que compartan sus experiencias y escuchen las nuestras.

NOTAS

[1] Escenario de la rebelión kurda en 1927 que declaró la República Kurda de Komara Agiriyê, que duró desde 1927 a 1931, hasta ser aplastada por el ejército turco.

[2] Región de otra rebelión en 1937.

[3] Líder de una rebelión que se extendió por la región de Diyarbakir en 1925.

[4] El sistema de los Aghas, actualmente funciona como un Estado dentro del Estado. A estos jefes tribales se les ha dado poder absoluto en sus villas con el objetivo de contener la lucha armada del PKK (especialmente desde 1984). Han sido armados hasta los dientes por el Estado, con sus propias bandas paramilitares, llamadas “guardianes de las aldeas”, responsables de innumerables atrocidades (incluyendo masacres, torturas, etc.).

Por José Antonio Gutiérrez D.

Traducción:  Bigo

Fuente: Anarkismo.net


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