La posible firma de un tratado de paz de la Guerra de Corea, el desarme nuclear y la situación de los derechos humanos en Corea del Norte regresaron a la agenda internacional luego de que las relaciones entre Norcorea y Estados Unidos se tensaran por las pruebas de misiles nucleares por parte del régimen de Pyongyang.
Una pequeña brecha de diálogo en un panorama internacional complejo hace que Obama tenga que abrir otro frente de negociación.
Según la prensa oficial, Corea del Norte quiere dialogar para lograr reafirmar el acuerdo que puso fin a la Guerra de Corea y estaría dispuesto a intentar retomar las conversaciones sobre el desarme nuclear.
La Guerra entre las dos Coreas finalizó con un arreglo entre las partes pero sin llegar a un tratado de paz definitivo. Esto dejó a la península coreana en estado de guerra. Para lograr que se firme un tratado de paz se necesita las firmas de ambas naciones, junto con la de EE.UU. y China. Si esto se logra, la Guerra de Corea, que cesó su accionar en 1953, logaría a su final definitivo.
Con respecto al desarme nuclear, el régimen comunista afirmó que está dispuesto a reanudar las discusiones, pero sólo si se levantaban las sanciones en su contra.
«La tarea fundamental para garantizar la paz y la estabilidad en la Península Coreana y en el resto de Asia es poner fin a la relación hostil entre la RPDC (República Popular Democrática de Corea) y EE.UU.», señala un documento publicado por la prensa local.
Este intento de acercamiento por parte de Corea del Norte aparece un mes después de la visita a Pyongyang del emisario norteamericano Stephen Bosworth.
Sin embargo, el enviado de los Estados Unidos, Robert King, reclamó que la atroz situación de los derechos humanos en Corea del Norte tiene que cambiar antes que ese país pueda esperar una normalización de las relaciones con Estados Unidos, en comentarios que seguramente enfurecerán a Pyongyang. Robert King cuestionó el historial de derechos humanos del país asiático en momentos en que un ciudadano estadounidense sigue detenido allí por ingresar el mes pasado sin permiso.
«Es uno de los peores lugares en término de la falta de derechos humanos», criticó King a reporteros tras reunirse con el canciller de Surcorea. «La situación es atroz».
King dijo que esa situación está impidiendo la normalización de los lazos entre Pyongyang y Washington, que nunca han tenido relaciones diplomáticas y están en un callejón sin salida a causa del programa nuclear norcoreano.
«La mejoría de relaciones entre estados Unidos y Corea del Norte requerirá de un mayor respeto a los derechos humanos por Corea del Norte», agregó.
King, que realiza en su primer viaje oficial al exterior, llamó a Norcorea a dejar en libertad al ciudadano estadounidense que tiene detenido, pero reconoció que Washington tenía escasa información sobre las condiciones en que está el individuo.
«Estamos trabajando activamente para determinar dónde está y para conseguir su libertad», aseguró King. «Hemos solicitado que nuestro poder protector en Pyongyang determine su condición y no hemos escuchado aún cuál es».
En ausencia de relaciones diplomáticas bilaterales, Suecia representa a Estados Unidos en Corea del Norte.
Fuente: observadorglobal.com