José María Aznar, fue presidente del Gobierno español gracias a lo olvidadizo, corrupto y elitista de los sucesivos gobiernos del PSOE, partido socialista español, encabezado por Felipe González. Todo amparado en la fantasía que la gente de izquierda, aunque el gobierno lo haga mal, no vota por la derecha.
El domingo 17 de enero 2010, se efectuará en Chile se segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
La figura en Chile es casi idéntica a la española, después de cuatro gobiernos sucesivos de la Concertación (1990-2010 ) con una corrupción galopante, despilfarrando una oportunidad económica formidable gracias al precio del cobre, que se la quisiera cualquier país europeo y que difícilmente se volverá a repetir en los años venideros, emerge una figura de derecha disfrazada de centro, “el lobo con piel de oveja”, Sebastián Piñera, que cautiva a los chilenos no satisfechos.
Pues no, los chilenos ya no somos tan ignorantes ni tan tontos.
Filosóficamente NO ganará Piñera, sino que perderá la Concertación, por repartir la torta en base a chorreos paternalistas y cediendo a grupos de presión.
Pero según nuestra visión, las matemáticas y tendencias a la que el gobierno chileno ha tratado con miopía, nos indica que Piñera vencerá con un 53,27 % de los votos y habrá entre el 2% y 3,5% de votos nulos, blancos y otros.
Por tanto, por más que nos duela a los auténticamente democráticos, a las víctimas aún pendientes de compensaciones de la dictadura, al ver el trasformismo de nuestras autoridades, auténtica fábrica de nuevos ricos, con sinecuras y chupópteros golpistas (que actuaron a favor del golpe militar del general Pinochet) enquistados entre las más altas autoridades, incluido presidentes y ministros. Eduardo Frei Ruiz-Tagle, no pasará el 46% de los votos.
Pasó lo mismo con su esposa Marta Larraechea en la Municipalidad de Santiago. Entre cuatro “gatos” elitistas con una ruin visión de la auténtica democracia y confiando torpemente de que la gente de izquierda no vota por la derecha, ocasionarán esta vez el “kataplún” de una Concertación que dice ser de izquierda, pero que actúa a gusto con las normas dejadas por la dictadura.
Lo damos firmado.
Por Mario A. De la Fuente Fernández
Presidente de la Organización de Militares Democráticos de Chile (Omidechi)